Sus primeras palabras fueron en recuerdo a su paso hace unos dos meses por Ávila donde pintó el primer ‘ojo’ al daruma de la factoría Nissan. El segundo, ya con el proyecto acabado, no quiere que le corresponda a Pedro Sánchez sino a un representante del PP. Comenzar y cerrar el ciclo.

Con ese recuerdo se presentó Soraya Sáenz de Santamaría, candidata a presidir del Partido Popular, en Ávila en una jornada «muy intensa» que la llevó por Castilla y León presentando su candidatura. Una candidatura en la que defiende su «energía, ganas y experiencia».

Su intención, señaló, era explicar a los afiliados que «tenemos un reto muy importante en el Partido Popular, que es poner a nuestro partido a punto y elegir presidente para ganar las próximas elecciones municipales y autonómicas y después las generales». Aseguró que en España hay «un sentimiento muy arraigado entre los españoles de que ha sido una absoluta injusticia que Pedro Sánchez pactando con los de Pablo Iglesias y con los independentistas, a quienes ya les está pagando el precio de la moción de censura, nos hayan sacado un gobierno que ganamos legítimamente» y por eso cree que «tenemos que elegir al que pensemos que es el mejor presidente del partido, pero también el mejor candidato para presentar de cara a ganar todas las elecciones que tenemos por delante».