Los usuarios de la campaña Lee en verano, que desde hace varios años organiza el Ayuntamiento para promocionar la lectura en espacios de ocio de la capital, han crecido el pasado mes de julio un 15% con respecto al mismo periodo del estío anterior, incremento notable que se hace mucho más destacado si la comparativa se hace con el 2016, ya que entonces se sitúa en un 46%.

Sonsoles Sánchez-Reyes, teniente de alcalde de Cultura, comentó a este diario la «satisfacción que para el Ayuntamiento supone ese aumento de lectores», que en términos absolutos es de 443 usuarios, ya que se ha pasado de los 2.934 contabilizados en el mes de julio de 2017 a los 3.377 del recientemente finalizado.

En esa valoración positiva de los resultados registrados en lo que va de verano, la teniente de alcalde de Cultura ha querido agradecer especialmente la implicación en la iniciativa del personal de bibliotecas del Ayuntamiento, de los padres que llevan allí a sus hijos y de los maestros que durante el curso inculcan el amor por los libros, «ya que la afición por la lectura no es algo que se consiga en un día, sino que es fruto de un trabajo continuo».

Por puestos de lectura, se registró un enorme incremento en el instalado en parque de la avenida Juan Pablo II, ya que de los 524 usuarios registrados en julio de 2017 se pasó a los 1.143 de este año, mientras que en los dos restantes hubo una ligera bajada, apenas significativa en el del Jardín del Recreo (del 2%, al pasar de 1.733 a 1.699, 34 menos, lo que no quitó para que concentrase más de la mitad de las peticiones del total) y un poco más señalada en el de la piscina de la Ciudad Deportiva (del 20%, al bajar de 677 a 535, reducción achacable a que el tiempo no ‘acompañó’ en la primera semana del mes).