El presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, aseguró esta misma semana que huirá de la confrontación en su reunión con el presidente del Gobierno el próximo 27 de noviembre, pero la consejera portavoz no hizo ayer lo mismo y criticó duramente a Pedro Sánchez por «aniquilar» el sector del carbón y las centrales térmicas, «poner en riesgo» el sector de la automoción, promover una reforma educativa «populista de izquierdas» y no contar con las comunidades a la hora de tomar medidas que luego tienen que ejecutar las autonomías.

Marcos afirmó que la «inseguridad» y los «vaivenes» por las decisiones del Gobierno central no sólo preocupan, sino que «realmente asustan y dan miedo», y calificó de «irresponsabilidad» que se «lancen» medidas sin evaluar las consecuencias para los ciudadanos, las empresas y la economía del país.

La portavoz de la Junta, Milagros Marcos, reaccionó con dureza a los cierres de la minería y de las térmicas, a las restricciones para el diesel, y a los efectos sobre el transporte, los vehículos agrícolas o la industria del automóvil, así como a la anunciada reforma educativa.

«La inseguridad es tal que asusta realmente, da miedo ver cómo se quiere descontaminar y no preocupa nada que se perjudique a los ciudadanos», argumentó, aunque ironizó con que «se agradece y tranquiliza» su «modelo de ocurrencia» en el que un día dicen una cosa y otro hacen otra.

Marcos reiteró que el PSOE «ha decretado el fin de las centrales térmicas» y «ha aniquilado» la minería en lo que calificó de una «decisión caprichosa» y sin alternativa, a la vez que preguntó por qué se clausuran plantas enclavadas en la Comunidad y se mantienen en otras autonomías gobernadas por socialistas.

«La inseguridad y los vaivenes afectan y preocupan a los ciudadanos tanto como a la Junta», anotó la consejera, que reclamó seriedad y rigor en las decisiones.