La noche de este viernes se colmó de luz, la que emanaba de algunos de los enclaves teresianos más importantes de la capital abulense, que rendía a través del espectáculo ‘Teresa ilumina Ávila’ un homenaje a La Santa. La idea, que partió hace casi dos años de la concejalía de Turismo del Ayuntamiento de Ávila, fue tomando forma hasta plasmarse en una realidad que siguieron centenares de personas en el primero de los cuatro días en los que se va a desarrollar este espectáculo de luz y sonido multimedia.
El hecho de elegir estas fechas, 22, 23, 29 y 30 de agosto para el desarrollo de este evento teresiano se basa en varios pilares, el primero de los cuales tiene que ver con la historia. No en vano, el 24 de agosto se fecha la reforma del carmelo y la primera de las fundaciones de Santa Teresa (San José). Además, el día 26 de este mismo mes tuvo lugar la transverberación de Santa Teresa, otro hecho que también tuvo a Ávila como escenario. De tal manera, la ciudad «ha querido acercarse a estos acontecimiento de una manera especial», afirmaba Héctor Palencia, concejal de Turismo, a esta redacción. El hecho de que el mes de agosto sea el mes turístico por excelencia y la circunstancia de ir dotando de contenido teresiano a la ciudad amurallada antes del comienzo de la celebración del V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa fueron otras de las razones que llevaron al consistorio a plantear este proyecto materializado por la empresa Ratzlab.
Seis fueron y serán los enclaves elegidos para las proyecciones audiovisuales, en coincidencia con seis monumentos íntimamente ligados a Santa Teresa, cinco de ellos de manera real y otro, el conjunto escultórico Vasallo (junto a la muralla del Mercado Grande), de forma sentimental. El planteamiento inicial, conseguido en esta primera noche de luz teresiana era que el público pudiera entablar un lenguaje a través de diferentes pasajes de la vida de Santa Teresa y mediante un paseo por la ciudad.
Las dos proyecciones más espectaculares se llevaron a cabo en las iglesia de La Santa y en San José. En la primera se rememoró el nacimiento y la infancia de Santa Teresa mientras que en San José se trató de recrear un éxtasis, sin duda, la proyección más atrevida. Con pases a las 22,30, 23,00, 23,30, 00,00 y 00,30 horas, el espacio se adecuó también a personas con movilidad reducida que en una fresca pero emocionante noche, siguieron el hilo argumental de luz y sonido. La iglesia de San Juan Bautista ofrecía un espectáculo de colores en tres dimensiones jugando con el campanario; en La Encarnación se trabajó con las luces proyectando los logotipos creados para la ocasión; en Santa María de Gracia la proyección se centró en una máquina que daba a conocer muchas obras vinculadas con La Santa y en el conjunto escultórico Vasallo se dio una animación especial a la escultura de Santa Teresa. Con proyección continua de 20,30 a 01,00 horas, en estos cuatro últimos enclaves la puesta de largo de este espectáculo consiguió sorprender a los ciudadanos.