Grito obrero contra la reforma

Agencias / Madrid
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Protesta masiva. Decenas de miles de trabajadores salen a las calles de 57 ciudades para exigir al Ejecutivo que rectifique la ley

Manifestación Contra La Reforma Laboral - Foto: Europa Press

 

 
Decenas de miles de personas -más de medio millón, según los organizadores- secundaron ayer masivamente las manifestaciones convocadas por los sindicatos CCOO y UGT por las calles de toda España para protestar contra la reforma laboral y los recortes. 
Se trata de la mayor movilización de las centrales en el país de los últimos años, más numerosa aún que la organizada con motivo de la huelga general del pasado 29 de septiembre. 
 Los secretarios generales de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, que encabezaron la marcha madrileña, explicaron que las protestas que se desarrollaban en 57 ciudades no buscaban confrontación con el Gobierno, sino corregir el decreto de reforma laboral aprobado. 
No obstante, como era de esperar, durante el trayecto se escucharon los primeros gritos a favor de la huelga general, un año y medio después de la última. Días antes, los sindicatos dejaron claro que no convocarían otro paro general hasta no encontrar el «ánimo» adecuado entre los ciudadanos. 
La manifestación de capital se inició a las 12,00 horas en la Plaza de Neptuno, camino de la Plaza de Cibeles, y arrancó en un ambiente de tranquilidad en la que las principales voces y consignas se lanzaron por parte de los manifestantes del bloque crítico del 15-M, quienes pidieron la convocatoria de una huelga general, como ha sucedido en Grecia. 
Si bien, a medida que se fue cubriendo el recorrido, la afluencia de personas fue en aumento, así como el griterío y el cántico de consignas. Se pudieron leer pancartas con lemas como Recortes cero a la banca y al clero o Tu botín, mi crisis. También hubo mensajes a favor de la ley de dependencia, y algunas banderas republicanas entre las habituales rojas, del color de los sindicatos. 
Asimismo, se pudo observar a personas portando fotos de los presidentes de CEOE y Cepyme, Juan Rosell y Jesús Terciado, con el mensaje: ¿De qué os reís?, y también alguna bandera en la que se leía Españoles, vamos hacia atrás. 
A la protesta se sumaron el ex ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, la portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez, y el coordinador general de IU, Cayo Lara, quien encabezó su propia pancarta. La sección de juventud del partido lo acompañó al grito de ¡Huelga general! 
La reacción por parte del Gobierno llegó de la mano del presidente, Mariano Rajoy, quien volvió a hacer un retrato pesimista de la situación económica del país, asegurando que «la crisis no ha tocado fondo», y avisó a los sindicatos de que España entera arrimará el hombro y «dejará atrás» a los que pongan obstáculos en el camino. 
Durante la clausura del Congreso del PP en Sevilla, el líder popular alegó que España «no se va a resignar», porque «quiere ponerse en pie, salir del atasco, atravesar este desierto de la crisis y dejar, cuanto antes, esta pesadilla a la espalda».
Por su parte, la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría adelantó que el Ejecutivo respetaba las protestas, pero subrayó que «continuará con las reformas» para crear empleo. «Lo que nos corresponde es trabajar y hacer lo necesario para que este país pueda crecer y crear empleo», aseveró.