La posible presencia de topillos campesinos y otros micróticos en la comunidad de Castilla y León puede ocasionar, en ciertos periodos y en circunstancias especiales, un riesgo grave para los cultivos agrícolas, como consecuencia de las explosiones demográficas derivadas tanto de la ciclicidad reproductiva típica de estas especies como a los condicionantes ambientales. Por esta razón, desde el Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León se han establecido una serie de condiciones y un procedimiento para el control de la cubierta vegetal por motivos fitosanitarios, mediante la limpieza por quema de cunetas, linderas, parcelas y desagües de parcelas en terrenos situados a más de 400 metros de masas forestales.
En este sentido, el jefe del Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería, Francisco Gil, ha precisado que «se trata de limpieza mediante quema y no de quema, que como todos sabemos, está prohibida en cualquier caso». De tal modo, cuando se detecte un problema de proliferación de topillos, los propietarios de las tierras de cultivo a las que puede afectar la presencia masiva de estos roedores, a través de las cámaras agrarias locales o bien de los Ayuntamientos, pueden solicitar a la Junta permiso para la limpieza mediante el procedimiento de quema de estos lugares. Así lo ha afirmado Gil, quien ha añadido que, en estos momentos, se hallan trabajando cuatro personas en toda la comarca de La Moraña, zona de mayor riesgo. «Pedimos a los agricultores que, en cuanto detecten la presencia de topillos, nos lo hagan saber y acudiremos en el plazo de 48 horas». Hasta ahora, el servicio ha recibido una solicitud de intervención «aunque, una vez inspeccionada la zona, no hemos detectado topillos por lo, seguramente, será denegada», ha añadido Gil.

El Jefe de Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería de Ávila será quien tenga la competencia para resolver las solicitudes de autorización de quema por motivos fitosanitarios para combatir la incidencia de topillo campesino previstas en esta resolución antes mencionada. Así, será quien considere los criterios de estado y distribución de las poblaciones y el riesgo que suponen para los cultivos adyacentes o próximos, así como la idoneidad de la limpieza y quema en función del estado de los cultivos.  Sin embargo, en los supuestos en que las quemas hayan de realizarse en zonas de la Red Natura 2000, conviene saber que, a partir de hoy, queda prohibida esta práctica en los espacios que posean esta consideración. Las labores de limpieza se ejecutarán de forma directa por los propios agricultores afectados, que habrán sido convocados a estos efectos por las juntas agropecuarias locales correspondientes y las tareas serán coordinadas y controlada por personal del Servicio Territorial de Agricultura