Cerca de medio centenar de aficionados quisieron acercarse en la tarde del viernes al  entrenamiento del Real Ávila.Un gesto de apoyo surgido a través de la redes sociales a lo largo del jueves y la mañana del viernes como respuesta a las informaciones surgidas y que colocan al equipo encarnado en una posición delicada ante la aparición de una deuda de cerca de 857.000 euros. Algunos con banderas, otros con bufandas o la propia camiseta encarnada, lo cierto es que los aficionados quisieron estar cerca de los jugadores en un momento delicado y en el que desde el club, a todos los niveles, se ha querido mandar un mensaje en busca del apoyo de los aficionados. «O sumamos todos o no será posible» se ha llegado a decir.  Una jornada en la que, como no podía ser de otra manera, se respiraba la preocupación propia de quien sabe de la complicada y delicada situación en la que se encuentra el equipo. Los comentarios sobre la situación económica no faltaban entre los asistentes, que recibieron desde los jugadores el correspondiente aplauso como agradecimiento.