Con indignación y resignación, la vida sigue en el Real Ávila tras lo sucedido el pasado domingo en el Adolfo Suárez, un hecho que ha trascendido las barreras regionales, siendo un tema de interés para medios nacionales por su carácter de inédito.

Una vez conocido el falló del Juez Único de Competición de la Federación de Castilla y León, Miguel Mambrilla, en el que se declaraba el 1-1 como resultado final del partido Real Ávila - Aguilar no dando por válido el tanto de Tirso en el minuto 94 que el asistente de Vaquero Girón sí apreció, el club abulense ya ha elaborado el recurso correspondiente a esa resolución para el Comité de Apelación de la Federación Española de Fútbol, aunque no se quiere hacer muchas ilusiones de que prospere.

Eso es al menos lo que se palpa en el seno del club. Deseando que haya justicia, no confían demasiado en ello, y por eso la apuesta que marca el  entrenador del equipo, José Luis Diezma, es la de pasar página, olvidarse de lo sucedido y concienciarse de que «tenemos 51 puntos. Si luego viene alguno más, bienvenido sea».

«En el entrenamiento del martes hablamos 5 minutos del tema con la plantilla, y ya se comentó que nos teníamos que olvidar de ello y centrarnos en los próximos tres puntos, que son los que nos jugamos el domingo ante el Lermeño. Estos ya pasaron y poco podemos hacer». Esta es la principal reflexión de José Luis Diezma, que van unidas a otras dos. Una es de autocrítica:«tenemos que cerrar los partidos antes. En el del domingo tuvimos oportunidades para ello y no acertamos. Tenemos que mejorar en este apartado para  no dar lugar a que sucedan luego cosas como estas». Y otra es un mensaje para el estamento arbitral y para la Federación, porque considera que todo lo sucedido, «no es muy serio, la verdad. Siguen saliendo detalles, como lo que están hablando ahora de que el presidente del Aguilar entró en el vestuario del árbitro..., en fin, que todo esto no ayuda y queda mucho por mejorar».

recurso. El documento que recibirá el Comité de Apelación por parte del Real Ávil, posiblemente el lunes, tendrá, además del correspondiente escrito,  pruebas de vídeo y de audio en las que se confirma que, una vez acabado el partido, el árbitro señala que el marcador es de 2-1 a favor de los locales.

Así lo prueban los gestos de alegría de los jugadores y técnicos del Real Ávila cuando se dirigen a los vestuarios, y las propias palabras de Luis Sierra, entrenador del Aguilar, en la rueda de prensa, en donde reconoce la derrota, por mucho que ahora quiera desdecirse de esas palabras. En el seno del club abulense existe un gran enfado con el técnico palentino por sus declaraciones sobre una inexistente invasión de campo, y también con el colegiado del encuentro, por cambiar en el acta el resultado que de palabra anunció al final del encuentro.

Las llamadas que Vaquero Girón realizó desde el vestuario del Adolfo Suárez son las que le incitaron a ese cambio, que deja al Ávila sin los dos puntos que ganó sobre el campo, y, se supone, que al árbitro zamorano mucho tiempo sin arbitrar. De momento, esta semana no lo hará.