El pacto de cuatro fuerzas políticas para presentar una alternativa al Partido Popular al frente del Ayuntamiento de Ávila saltó por los aires en la tarde de este miércoles cuando Ciudadanos, la segunda fuerza más votada en las pasadas elecciones del 24 de mayo, anunciaba que se retiraba del mismo y anulaba su intención de presentarse a la Alcaldía de la Ciudad. Una análisis de la situación por parte de su Junta Directiva concluía que no se observaba la estabilidad necesaria en esa unión para poder crear un gobierno estable, razón por la que decidía dar un paso a un lado y dejar que sea el Partido Popular el que comience la legislatura gobernando en minoría con sus 9 concejales. José Luis Rivas será elegido alcalde el próximo sábado en el Pleno de constitución, pero se enfrenta a una situación en la que necesitará de acuerdos puntuales para poder sacar adelante sus proyectos principales, toda vez que C’s reiteró, eso sí, que no hará un pacto de gobierno con el Partido Popular para los próximos cuatro años y únicamente habrá, si se llegase a ellos, acuerdos puntuales.
Después de toda una mañana de continuos rumores sobre variaciones de posiciones de los partidos que apostaban por desbancar al Partido Popular de la Alcaldía de Ávila después de 24 años, la convocatoria a media tarde de una rueda de prensa por parte de Ciudadanos hacía presagiar que ese acuerdo a cuatro tenía las horas contadas. Y así fue. El cabeza de lista de C’s en las pasadas elecciones municipales, Marco Antonio Serrano, anunciaba que «hemos decidido retirarnos de esa reunión a cuatro porque no vemos suficiente estabilidad a ese Ayuntamiento que saldría y tampoco vemos en ese gobierno una verdadera opción de cambio. Retiramos la posibilidad de liderar ese cambio y no vamos a presentarnos a la Alcaldía de Ávila».

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