Las barbacoas del Puente del Duque se pueden usar también en verano

Isabel Camarero
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El Ayuntamiento ha puesto en marcha dos nuevas construcciones, inutilizando las antiguas, y a las que se sumará una tercera cuyo uso es compatible con las medidas antiincendios

Está claro que uno de los grandes alicientes de Gredos es el disfrute de sus entornos naturales en plenitud y eso incluye el poder realizar comidas campestres y barbacoas, por supuesto. De eso saben y mucho en el Ayuntamiento de Hoyos del Espino y por ello han llevado a cabo la adecuación de las antiguas barbacoas con las que contaban en el Puente del Duque para que puedan utilizarse también en la campaña de verano con seguridad.  

La rehabilitación ha sido integral y se han tenido que levantar a modo de edificaciones de dos cuerpos pero que pueden utilizarse por hasta cuatro grupos de personas a la vez y es que sin duda la posibilidad de poder guisar en parrillas a cielo abierto es uno de los grandes alicientes a la hora de elegir este entorno. Las restricciones por el peligro más que comprobado de incendio ha ido a más con el paso de los años y por eso desde el Consistorio han invertido una importante cantidad de dinero para ponerlas en uso de forma segura. De momento cuentan con dos barbacoas y serán tres en breve. En cada una se ha invertido 6.000 euros y las tareas de construcción las han llevado a cabo operarios contratados por el Consistorio, tal y como asegura el alcalde de la localidad, Jesús González Veneros (PP). Se han querido además dar prisa en adecuarlo para que pudieran utilizarse con la llegada del verano que es la época de mayor afluencia de visitantes. No hay que olvidar además que a finales de este mes, el día 25, se desarrollará en Gredos uno de los acontecimientos más multitudinarios de la época estival, el concierto de Músicos en la Naturaleza.

puesta de largo. Para comprobar que todo va bien y que las construcciones  cumplen su cometido, el fin de semana que acaba de pasar ha sido testigo del disfrute de las nuevas instalaciones un nutrido grupo de casi 40 personas con motivo de la fiesta de las Quintos, de las personas nacidas en la localidad entre los años 1960 y 1963 quienes por supuesto compartieron mesa con sus respectivos familiares haciendo de las nuevas instalaciones una multitudinaria inauguración en la que no faltó de nada: churrascos, chuletas, chorizos y hasta una caldereta.