Quince días de campaña, de patear las calles y plazas de la ciudad y de recorrer buena parte de la provincia y estar en permanente contacto con la gente, dan para situaciones de todo tipo que los candidatos se suelen tomar con el mejor humor posible pese al enorme cansancio acumulado.

En el caso del PPhablamos de cerca de 14.000 kilómetros recorridos, según los cálculos de su presidente provincial, Antolín Sanz, con sus ocho rutas diarias, a razón de 800 cada vez que salían. De lo más impactante que ha visto estos días destaca cómo «dos personas, un padre y un hijo, recogieron en dos días nada menos que 50.000 pollos, uno a uno, para meterlos en jaulas».

Y hablando de aves, el candidato municipal del PP en Ávila, Óscar Arroyo, desvelaba que durante un acto de campaña en Las Vacas, coincidiendo con la subasta de banzos por las fiestas de la Virgen, él levantó la mano para avisar de su presencia a otras personas y quien dirigía la subasta entendió que pujaba por un gallo que finalmente se llevó por el módico precio de 15 euros y del que dieron cumplida cuenta.