Ángel Martín (Madrid, 1969) se ha ganado con el entusiasmo, trabajo y ganas de arriesgarse que ha llevado por bandera siempre en su vida laboral ser reciente finalista de los premios europeos All Digital en la categoría "Best Digital Change Maker"(Mejor gestor digital del cambio) y lo ha hecho gracias a uno de los trabajos desarrollados en el Espacio CyL Digital de la Junta de Castilla y León para el que trabaja desde el año 2016.

 Lo hizo con un proyecto de robótica enfocado a usuarios con discapacidad, concretamente pertenecientes a La Casa Grande de Martiherrero. No tiene reparo en asegurar que el reconocimiento le ha llegado gracias a una persona, Graciela Parrilla, quien es Ingeniera de Telecomunicaciones del Servicio de Sociedad de la Información de la Dirección General de Telecomunicaciones de la Consejería de Fomento. Si no es por ella, que le animó, no se hubiera presentado a los galardones. "Es una de mis superiores en Valladolid y a la que debo todo lo relacionado con este reconocimiento".

 Implicado en el proyecto reconoce que también llegó a ponerlo en marcha un poco por casualidad, la idea estaba ahí, las ganas de desarrollarla también y una conversación con Javier Martín, psicólogo de ‘La Casa Grande’ y amigo personal, le acabó de empujar a sumergirse en la iniciativa, también guiado por este profesional. Son talleres de una hora y media, cuenta, "al principio, empezamos con seis alumnos y a día de hoy ya han pasado por allí 100. Algunos de ellos son ‘repetidores’ dado que el taller ha ido evolucionando".

¿Qué es lo primero que le viene a la cabeza sobre Ávila?

Muralla, en todos los sentidos, como monumento espectacular y mentalmente de una gran parte de sus habitantes.

¿Qué es lo que más le gusta de Ávila?

Tener acceso a lo que necesitas en un tiempo muy corto. Es una ciudad segura, tranquila, muy manejable en el día a día, con muchas horas de sol y los desplazamientos son breves.

¿Y lo que menos?

La falta de frescura, valentía, osadía, impulso en bastantes ámbitos, que nos hace estar unos pasos por detrás del momento que está viviendo la sociedad en general.

Un lugar de la ciudad para perderse

El carril bici de Campo de Azálvaro. Si me tengo que perder en la provincia que sea en la Sierra de Gredos, en el Circo de Cinco Lagunas.

Un personaje abulense que le haya marcado.

El alpinista Carlos Soria por lo que ha conseguido, cómo y cuándo lo ha conseguido, la tenacidad en perseguir sus objetivos y los valores que transmite.

El mayor cambio que necesita Ávila es…

Estar comunicados por vía férrea y carretera con Madrid y el resto de Castilla y León de forma acorde al siglo en el que vivimos. Unas comunicaciones racionales y libres de peaje traerían desarrollo industrial, fijaría población y establecería las bases para su crecimiento.

Y tiene que mantener …

El casco histórico de Murallas adentro y alrededor, evitando su deterioro y atrayendo visitantes que contemplen  la monumental Muralla y el patrimonio que guarda.

¿Qué le parece la ciudad hoy día?

Siendo un lugar agradable, creo que está adormilada, carente del impulso de esa juventud que se marcha y ya no regresa. Ávila necesita una puesta en común de todos  los agentes sociales para llegar a acuerdos, promover e impulsar su desarrollo.

¿Cómo ve la ciudad en el futuro?

Receptora de visitantes para contemplar patrimonio.

¿Qué puede aportar a la ciudad?

He vivido en otras ciudades antes de asentarme en Ávila, y he conocido otras formas de hacer ciudad que pueden incorporarse a nuestra capital. Es importante  transmitir a todos aquellos que tienen su empeño en el desarrollo de Ávila, la inquietud por mirar más allá de nuestra frontera, de observar, buscar, curiosear, intentar, admirar, probar, conservar, impulsar.