El diputado nacional del PP de Ávila Pablo Casado duda de la fiabilidad de los datos arrojados por la Encuesta de Población Activa (EPA) del INE para la provincia de Ávila, que dejan una subida trimestral del 33% y un aumento de parados en números absolutos (5.100) que copa casi la mitad del registrado en España. «La cifra sencillamente es imposible a efectos estadísticos, no ha habido una destrucción de empleo sustancial como para que eso sucediera», afirmó Casado, quien achacó esta situación a que «es una encuesta que tiene un muestreo» que «en las provincias con menos población no es tan ajustado en todas las ocasiones», según las «explicaciones ofrecidas desde organizaciones dependientes del Ministerio de Economía», indicó. 

 

En este sentido, preguntado por qué no sucede esto en otras provincias pequeñas de Castilla y León, como Soria, Casado argumentó que «ha pasado en otras ocasiones en otras provincias», si bien abogó por esperar a la publicación la próxima semana de los datos del paro registrado en el Servicio Público de Empleo (antiguo Inem), a su juicio «los resultados reales».

 

 

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