El 50ºTrofeo Adolfo Suárez se fue para Castilla La Mancha, a las vitrinas del Mora. Lo hizo gracias al tanto de Kevin cuando el trofeo empezaba a vislumbrar la prórroga, y quién sabe si los penaltis, como la solución más lógica. Hubo ganas, pero faltó fútbol. A estas alturas de temporada aún no se exige, ni preocupa, como la falta de gol. Cuando llegue el último fin de semana de agosto y la temporada arranque de nuevo será otra historia.
Con un merecido homenaje a David Terleira como pichichi del grupo VIII de Tercera la pasada campaña comenzada el LTrofeo Adolfo Suárez. Tercer partido de la pretemporada para los de Pepe García pero primero ante una afición con ganas de conocer las nuevas caras de los suyos. No cambia el ‘9’. Terleira sigue siendo el dueño indiscutible en ataque. No así la portería, donde Garrosa apunta a titular bajo palos, o la medular, donde Diego Pérez, otro excolegial, quiere y puede tomar los galones en la construcción. Si quiere puede. Calidad ha demostrado para ello en la División de Honor, aunque la Tercera es un mundo bien diferente.
Quiere Pepe García que los suyos vayan tomando ritmo de Tercera. Yen ello apareció el Mora, invitado a un trofeo para el que empezó proponiendo más el equipo local. Primero Perdi y después Terleira, con apenas un minuto de diferencia, cruzaron en exceso cuando buscaron la meta de Antonio.
Entre bronca y bronca avanzaba el partido. De por medio, un buen disparo de Víctor desde la frontal –minuto 28– que Antonio atajó en dos tiempos. Dominaba la Cebrereña, aunque sin claridad. Aguardaba el Mora, esperando su momento. Roberto recordó que los manchegos también jugaban. De falta directa –minuto 32– obligó a Garrosa a volar para despejar a córner. El capitán era de los pocos que parecía capaz de ponerle algo de coherencia al juego. De la intensidad ya se encargaba Cedrick, uno de esos centrales con los que pasa el jugador o el balón, pero nunca ambas cosas.
Fuera por el calor, por la presión del Mora, un equipo bien armado, o por un parón para refrescarse lo cierto es que los ánimos se enfriaron. Lo aprovechó el equipo manchego hasta el descanso para hacerse con el balón. Lo dominaron, lo movieron y Alfredo sobre la bocina –minuto 45– tuvo el 0-1 cuando cambiaron el balón de banda a banda y Borja, desde el extremo, la colgaba. El ‘9’ manchego superó a Garrido por alto en el segundo palo para rematar de cabeza. Se fue alto un remate que parecía gol.
Saltó con ganas en la segunda mitad el Mora. Con más velocidad, los manchegos empezaron a cercar la meta local. Carlos y Roberto la empalmaron desde fuera. No encontraron portería, pero las intenciones eran muy diferentes al inicio de la primera mitad.
Carrusel de cambios en la segunda mitad. Nuevos nombres, nuevas energías, aunque el encuentro seguía ‘embarrado’. Sobraban ganas pero faltaban ideas. Lo que no faltó fue la polémica. Porque Cédrick –minuto 66– cometía un claro penalti cuando cortaba un centro al área con la mano. En los tiempos del VAR, todas las miradas cayeron en el árbitro, que no apreció intención en la acción. Las reclamaciones locales quedaron en nada.
Como en la primera mitad Roberto –minuto 75– probaba, esta vez, a Javi Gordo, a balón parado. Aunque escorado, buscó con toda la intención el primer palo. Javi resolvió bien.
Perdió empuje la Cebrereña con los cambios.Lo ganó el Mora, que encontró el premio cuando Kevin, tras una larga conducción, se colaba entre Tena y De Miguel para rematar con claridad –minuto 78– ante Javi Gordo, que poco pudo hacer.
Quiso reaccionar con el 0-1 el equipo culturalista aunque no encontraba su mejor aval. Apenas un disparo a puerta sumaba Terleira, tan cubierto como desasistido. Tena y Garrido, desde fuera del área, buscaron el gol en los minutos finales. Entre Martín y la falta de puntería resolvieron. El Mora ya no estaba dispuesto a dejar escapar el trofeo.