El peor momento del operativo contra incendios desplegado por los Bomberos en el fuego generado este miércoles al mediodía en la fábrica Composites Avanzados de Arévalo, fue cuando «fallaron las estructuras» de la planta de producción de la factoría ubicada desde hace tres años en el polígono industrial de la ciudad morañega. Así lo afirmó a esta redacción Mariano Bernaldo de Quirós, jefe de las operaciones que se desarrollaron por parte del Cuerpo de Bomberos de Ávila en el lugar del siniestro, quien añadió que «aunque el incendio fue muy aparatoso por la densidad del humo negro, no ofreció peligrosidad en ningún momento». Así, tras fallar las estructuras de la nave en la que se originaron las llamas, la intervención de los especialistas consiguió reducir el riesgo y «asentarlas». Fue el momento en el que Mariano Bernaldo de Quirós decidió solicitar la colaboración de efectivos de Medina del Campo, que se pusieron a sus órdenes. «La carga del fuego tampoco era importante al ser una nave muy grande», añadió el sargento del parque de Bomberos de Ávila al relatar a Diario de Ávila la intervención de los especialista en este siniestro. Para sofocar las llamas usaron agua y la prioridad no fue apagar el fuego sino «dejar que se consumiera teniéndolo siempre controlado». Al cabo de dos horas tras el inicio, sus características eran otras. El humo ni era tan denso ni tan negro y se puede decir que « a las 17 horas ya no había ningún problema, aunque mantuvimos retenes para controlar el lugar y evitar cualquier reavivamiento», afirma Bernaldo de Quirós. En la operación intervinieron siete vehículos contra incendios; en concreto, cinco camiones autobombas (de Ávila, Medina del Campo y Arévalo), dos equipos de rescate en altura (escala de Medina y brazo articulado de Ávila) y voluntarios de Protección Civil de Arévalo y Ávila, que les suministraron agua para beber durante todo el operativo. A nivel estructural, tal y como relató Mariano Bernaldo de Quirós, la fábrica ha sufrido daños severos en una de las zonas más bajas donde, debido al calor, se produjeron hundimientos.
En cualquier caso, y cuando han pasado dos jornadas tras el incendio, la Guardia Civil ha abierto diligencias para investigar las causas del suceso ocurrido en la factoría Composites Avanzados. Estos trabajos se llevarán a cabo a partir de ahora con la colaboración de la Unidad Especial de Incendios, tal y como han informado a esta redacción fuentes de la Subdelegación del Gobierno, que también han afirmado que, cuando se determinen las causas del origen del fuego, «se procederá en consecuencia».
posibles traslados temporales. Una de las posibilidades que se barajan ahora es la de ofrecer a los 36 trabajadores que componen la plantilla de Composites Avanzados un traslado temporal a alguna de las plantas que la factoría tiene ubicadas en Madrid. Estos términos, que no han sido confirmados por la empresa, se barajan en los ámbitos a los que ha podido acceder este periódico.
Así lo dejó entrever también el alcalde de Arévalo, Vidal Galicia Jaramillo, que ha mantenido conversaciones con la dirección de la empresa arevalense, tal y como ha confirmado a Diario de Ávila. «Me han trasladado cierta tranquilidad e incluso puedo decir que algún administrativo ha vuelto a su puesto de trabajo tras el incendio». Sin embargo, no se ha aventurado a hablar de plazos para el reinicio de la actividad en las instalaciones del polígono industrial de Arévalo.
Por lo que se refiere a la seguridad, el regidor de Arévalo ha afirmado que durante toda la noche del miércoles al jueves, bomberos voluntarios de Arévalo han mantenido activos retenes para controlar el lugar.