El Pleno ordinario que se celebró este último lunes de mes en la Diputación de Ávila se puede describir casi como el del consenso. Había ganas de pactos y estos tomaron forma a modo de enmienda transaccional a cada una de las tres mociones propuestas durante la sesión: dos llegaban de la mano del PSOE y una por parte de Izquierda Unida. La más interesante, por cuanto trajo de debate, se encargó de exponerla a los asistentes el portavoz socialista, Tomás Blanco, quien pedía el retorno de los Planes Provinciales y del Fondo de Cooperación Local que en su día –pues llevan ya años desaparecidos porque ni el Estado ni la Junta de Castilla y León volvieron a dotarles de presupuesto– servían para diferenciar y ayudar a los pequeños municipios.
Cierto es que tardó en llegar el acuerdo porque tanto Blanco como el portavoz ‘popular’ en la Diputación,Ignacio Burgos, no eran capaces de alcanzar un punto de entendimiento. Fueron varias las intervenciones de uno y otro y en todas hubo además no pocos reproches sobre si estos fondos de inversión desaparecieron por culpa del PP o del PSOE, sobre si se acabaron con Rajoy en el Gobierno o sobre si fueron víctimas de las políticas socialistas «desacertadas» como las del Gobierno de Zapatero y su famoso Plan E. En definitiva mucho debate y poco acuerdo.
Se trataba también de una cuestión de matices porque Blanco quería rescatarlos en el futuro con el mismo nombre que tuvieron y Burgos le daba la opción de rescatar las partidas pero no para los mismos fines porque las necesidades de los ayuntamientos –argumentaba– se han diversificado con el paso de los años y no había que destinarlo ya sólo a inversión como estaban pensados originariamente.Vueltas y vueltas sobre un asunto en el que ya desde el principio el PSOE contaba con el apoyo de IU y de UPyD.
Al final fue el presidente de la Diputación,Agustín González, quien con apenas un minuto de intervención lograba zanjar la polémica: pedir que vuelvan tal cual, como planes provinciales y Fondo de Cooperación Local, porque «es razonable pedir las dos con los fondos que se pueda» y con las ayudas que ya están en marcha como las que salen de los impuestos de la Junta y del Estado, pedir a mayores por si luego vienen «con las rebajas», insinuó y zanjó.
No fue la única propuesta que llegó de los partidos de la oposición ya que también el PSOE pedía que la Diputación asesorara a los ayuntamientos para que los municipios se adapten con seguridad a la nueva ley de telecomunicaciones para que sepan de sus obligaciones al respecto pero también de sus derechos. En este punto elPartido Popular e Ignacio Burgos en esta ocasión y sin tener que mediar el presidente de la institución les planteó la posibilidad de contratar un servicio externo precisamente para que pudiera llevar a cabo ese asesoramiento.Por su parte, IU llevó al Pleno de la Diputación la idea de conmemorar en Arévalo y la Moraña el aniversario del IV Centenario de la publicación de la segunda parte de El Quijote, que se cumpliría en 2015 y del IV Centenario del fallecimiento deCervantes (2016). Se centraban en Arévalo porque es precisamente la localidad que vio nacer a Fray Juan Gil quien recordaban logró rescatar a Miguel de Cervantes de la prisión de Argel en la que estaba confinado en 1575 y tras múltiples gestiones y el pago de 500 ducados en oro que es lo que se pedía de rescate para traerlo de vuelta a España. El sí de todos los grupos políticos lo logró casi desde el principio la formación representada en la persona de Santiago Jiménez ahora bien la proposición transaccional que llegó por boca del portavoz ‘popular’ Ignacio Burgos abogó porque esa celebración llegara de cara a 2016, contando para ello con la institución Gran Duque de Alba y las áreas de Cultura yTurismo de la Diputación así como las administraciones y entidades que lo estimen.No así en 2015 puesto que los esfuerzos están
centrados evidentemente en el V Centenario del nacimiento de SantaTeresa