Hay dos tipos de inversores en bolsa: los que apuestan por valores seguros y los que prefieren arriesgar para sacar más rentabilidad. Los grandes partidos políticos de Castilla y León, PP y PSOE, son de los primeros. En estos tiempos de convulsión política prefieren hacer bueno el dicho de que los experimentos se hagan con gaseosa. A falta de ocho meses para las elecciones municipales del 25 de mayo, los alcaldes que ya superaron la prueba de las urnas en 2011 se encuentran mejor colocados para repetir como cabeza de cartel.

Hoy por hoy, los actuales regidores municipales de las principales capitales de Castilla y León son los que más papeletas tienen para optar a la reelección, aunque algunos por cansancio personal y otros por cuestionamiento interno podrían dar un paso a un lado para dejar el camino libre a nuevas caras.
En el Partido Popular han cambiado de velocidad respecto a la designación de candidatos. Si en el mes de junio el vicesecretario general Carlos Floriano quería acelerar los anuncios para después del verano, llegó septiembre y el presidente, Mariano Rajoy, dijo que no había «ninguna prisa» para dar a conocer los nombres, con lo que todo se aplaza hasta comienzos de 2015.

En el PSOE, en cambio, se darán más prisa y el 30 de noviembre será la fecha para  que los militantes castellanos y leoneses elijan a sus candidatos por elecciones primarias en las localidades mayores de 20.000 habitantes y a las autonómicas. Casi sin descansar del proceso para designar al líder.

Dentro del Partido Popular, las mayores dudas de continuidad se encuentran en Valladolid. La última polémica de Javier León de la Riva sobre las violaciones, junto a los procesos judiciales que tiene pendientes en vísperas de las elecciones y su dilatada trayectoria, (va para 20 años como alcalde y rozará la setentena en 2015), hacen que dentro de su partido se cuestionen la idoneidad de continuar con él.

Él ha expresado por activa y por pasiva su deseo de seguir cuatro años más y las dudas no están en Valladolid sino en Génova, que por otro lado es quien tiene la última palabra. No obstante, de momento, no hay nadie que se vea capaz de decirle que se vaya, sino que esperan que sea él mismo quien reflexione y piense en lo mejor para la ciudad y para el partido.

La incógnita es quién coge la patata caliente si León de la Riva lo deja. En su equipo se perfila como sucesora la concejala de Cultura Mercedes Cantalapiedra, que dentro del partido tiene muchos detractores. Otra posibilidad es el presidente provincial del PP y delegado del Gobierno, Ramiro Ruiz Medrano, que aún contra su voluntad tendría que aceptarlo si se lo piden instancias superiores.

A lo largo de la legislatura ha habido alcaldes, también dentro del PP, que tenían más el pie fuera que dentro. Es el caso de Javier Lacalle en Burgos, desahuciado durante la crisis de Gamonal y con dos dimisiones dentro de su equipo de Gobierno en lo que va de mandato que son un lastre. Sin embargo, pese a todo ha logrado restaurarse y hoy por hoy es el que más posibilidades tiene de repetir. No obstante, en el PP siguen atentos su gestión y un resbalón más similar al del bulevar con otros proyectos en marcha, podría truncar sus aspiraciones. En caso de no ser él, la mejor colocada para encabezar la lista popular sería la teniente de alcalde Carolina Blasco.

Al margen de León de la Riva, el único de los alcaldes de capital que ha mostrado claramente su disposición a repetir en el puesto es el de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, quien en una reciente entrevista aseguró con rotundidad: «Quiero repetir como candidato del PP a la Alcaldía en 2015».

Hay otro grupo de alcaldes populares a los que no les importaría probar suerte en otras áreas de la política, pero visto el horizonte incierto de 2015, todo apunta a que repetirán. Están, como se suele decir «a disposición del partido» (y el partido no está por experimentar). En este apartado se puede incluir a Miguel Ángel García Nieto (Ávila), y Rosa Valdeón (Zamora).

Los populares que se estrenaron en 2011 como alcaldes: Alfonso Polanco, en Palencia, y Emilio Gutiérrez, en León, también tienen, a día de hoy, el apoyo para optar a la reelección y nadie les cuestiona dentro del partido.

Respecto a las dos ciudades en las que gobierna el PSOE también es muy probable que continúen, siempre con la salvedad de que les puede surgir un contrincante en primarias. Carlos Martínez, en Soria, tiene todo el respaldo del partido y Clara Luquero, en Segovia, aunque no era la ‘favorita’ de la dirección provincial, ha conseguido afianzarse en los pocos meses que lleva en el cargo tras el cese de Pedro Arahuetes y, en principio, tiene el camino libre para seguir.

Con información de Álvaro Melcón (Diario de Burgos), Carlos H. Sanz (Diario Palentino) y Pablo Serrano (Diario de Ávila).