• «Fuimos a Simancas a competir y a sumar los tres puntos».El técnico abulense saca una valoración positiva de su equipo «porque incluso en inferioridad fuimos superiores».
Fastidiados, por el resultado y por la actuación arbitral.Porque en el mundo del fútbol bien es cierto que nunca se pueden par por seguros tres puntos, pero la realidad, y el discurrir inicial del partido, parecían confirmar que la Cebrereña estaba en condiciones de traerse el triunfo de Los Pinos ante un Villa de Simancas que hasta la expulsión de Juanma, y ya con Jota en la grada, no puso en cuestión lo que parecía seguro. Al final los tres puntos se quedaron en casa, gracias a los goles de Gallego –87’– y Rodri –92’– y que hacía que los culturalistas regresaran de tierras vallisoletanas «muy fastidiados».
Porque volvieron sin el premio los de Pepe García de un campo «que pensamos que era propicio para sacar los tres puntos». Una idea «que el equipo asumió desde el inicio y fuimos desde el primer minuto a por el partido».Inclusive al descanso la Cebrereña «ya se marchaba a los vestuarios con 0-1 pese a tener un jugador menos –Jota– y con la sensación de que se podía haber metido un gol más».
Sin embargo para el entrenador abulense «hubo un partido, una Cebrereña, antes de la segunda expulsión, donde el equipo demostró ser superior, y un partido muy diferente tras la segunda expulsión, con una Cebrereña condicionada por tener dos jugadores menos». Porque a partir de ese momento –minuto 65– «nos tuvimos que echar hacia atrás y aguantar el temporal del Villa de Simancas, que jugaba en su campo, rodeado de mucha gente, y al final te sale todo mal porque el segundo gol llega en el tiempo de descuento».
Un tanto que supuso un castigo «severo». Tras un final así confesaba el entrenador de la Cebrereña que «te vienes muerto».Al menos desde una primera impresión, porque «una vez que te paras y haces una valoración puedes estar contento, porque incluso con un jugador menos fuimos superiores a ellos, merecimos sacar un mejor resultado en ese tiempo, pero también es cierto que te vienes vacío porque hay futbolistas que se dejaron el alma, y no puedes sino quitarte el sombrero porque con nueve jugadores el Simancas, más allá de jugadas a balón parado o centros laterales, no eran capaces de generar ocasiones de gol, no al menos mediante superioridad en el área, ni por fuera ni por dentro. El equipo supo ponerse el mono de trabajo». Una derrota que no deja «reproches» sino todo lo contrario. «Fuimos a por los tres puntos, a ser superiores al rival y lo afrontamos con la naturalidad de un equipo cuyos futbolistas supieron hacerlo».
Pese a una nueva jornada sin ganar, «soy optimista.Ante el Palencia nadie lo esperaba y sumamos. Queda mucho y lo veo de forma esperanzadora y salvo en Salamanca hemos sabido competir en todos los partidos».
Tocará volver a competir la próxima jornada en El Mancho sin dos jugadores como Juanma y Jota y ante un Atlético Bembibre que llega en una racha de tres victorias –La Bañeza, La Granja y el Villa Simancas– consecutivas. «Viene lanzado, tendremos dos bajas importantes, pero entrarán dos jugadores que sabrán aportar cosas importantes y nosotros en El Mancho no hemos perdido. Trataremos de hacer bueno nuestro campo».