Unidad de Diagnóstico Rápido: agilidad para casos graves

M.R
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Un total de 365 pacientes nuevos han sido atendidos en lo que va de año en esta unidad liderada por un internista

Unidad de Diagnóstico Rápido: agilidad para casos graves - Foto: David Castro

Hay personas cuyo delicado estado de salud es incompatible con la lista de espera para pruebas diagnósticas. En los casos en los que una primera exploración médica no revela qué es lo que le sucede pero sus síntomas apuntan a que puede tratarse de una enfermedad potencialmente grave, esos pacientes son derivados a la Unidad de Diagnóstico Rápido (UDR) «con el objetivo de evitar demoras en el estudio diagnóstico» de esas personas, que pese a no precisar ingreso hospitalario «sí requieren una atención integral basada en la atención compartido por los dos niveles asistenciales», la Atención Primaria y la Atención Especializada.

Un total de 365 pacientes nuevos han sido atendidos en la Unidad de Diagnóstico de Ávila en lo que va de año, una cifra similar a la registrada el año anterior, cuando fueron 366 en los doce meses completos, pero el triple que cuatro años antes. Y es que las cifras van en aumento, según señala Daniel Muñoz, director médico del Complejo Asistencial de Ávila, que lo atribuye a que «la continuidad asistencial se está potenciando mucho» por parte de Sacyl y los médicos de familia «han captado perfectamente el objetivo de esta unidad» y cuando la derivan un paciente es «con un criterio acertado». En este sentido, añade que «los médicos de Atención Primaria tienen un internista de referencia» a través del cual saben de primera mano cuál es la situación real de la lista de espera para pruebas diagnósticas y en aquellas ocasiones en las que el paciente no puede esperar «porque la sospecha de patología grave es grande», directamente «le recomiendan que acuda a la Unidad de Diagnóstico Rápido». De hecho, la mitad de los pacientes nuevos de este año fueron derivados por su médico de cabecera (182), el resto llegaron a través de los médicos especialistas.

Debido precisamente a la idiosincrasia de la Unidad de Diagnóstico Rápido, entre sus objetivos está el de garantizar que los pacientes que son derivados a ella no esperen más de tres días laborables para ser atendidos. En el caso de Ávila, ese objetivo se ha cumplido este año en el 97 por ciento de los casos. De hecho, tan solo 10 pacientes fueron citados en la consulta con el internista encargado de la UDR en cuatro días o más, tal como revela su estadística de indicadores de actividad facilitada a esta Redacción. Cabe destacar, además, que esa necesaria agilidad se ha mejorado este año respecto al anterior, ya que en 2017 la Unidad de Diagnóstico Rápido atendió al 90% de los pacientes en menos de tres días, mientras que en lo que llevamos de 2018 se ha conseguido en el 97% de los casos.