Alberto Sánchez / Ávila
Apenas se han disputado tres jornadas de la competición. Pocos partidos en el bagaje del grupo VIII de Tercera División como para aventurar conclusiones. Sin embargo existe una lectura en la que tres partidos –incluso ya estaba sobre la mesa antes de disputar los mismos– han bastado para confirmar y poner de acuerdo –entre otras muchas cosas– a los entrenadores del Real Ávila y la Cultural Deportiva Cebrereña, Borja Jiménez y Pepe García, y no es otra cosa que este año la temporada promete ser «igualada» más allá de una Arandina que ya es líder «y no por casualidad». Tres partidos y tres victorias suma el último de los rivales precisamente del equipo encarnado, que pese a contar con opciones «hasta el mismo final de partido» por haber competido por un premio mayor, lo cierto es que el equipo de Javier Bermúdez «tiene una pegada brutal», lo que hace tener claro que para Borja Jiménez «es el claro candidato al campeonato. No se dejarán muchos puntos por el camino y en El Montecillo será muy difícil puntuar».
Lo pudo comprobar el cuadro de Borja Jiménez –algunos de sus jugadores reconocían tras el mismo la calidad técnica de un desconocido para ellos como Gustavo– en un partido «que si bien es verdad que aguantamos su empuje hasta el 93’ no tuvimos el fútbol alegre que esperábamos y nos costó sumar los pases necesarios que nos hicieran sentir bien» valoraba a su regreso un entrenador que, a la espera del paso de las jornadas, pone en la terna de la zona alta a la Gimnástica Segoviana, Villaralbo, Cristo Atlético o Palencia Balompié, por el «desembolso que han realizado», y al Mirandés B y el Becerril, «porque si han sumado tres victorias consecutivas por algo será».Guarda un hueco para una Cebrereña «que habrá que estar atenta hasta dónde puede dar de sí, porque está haciendo las cosas bien».
De momento no se incluye en el grupo –«debemos tener los pies en el suelo» se le escucha recalcar constantemente aPepe García– pero el entrenador de los culturalistas tiene claro que junto a lo que espera sea un campeonato «notable» de la Arandina y el empuje del Palencia, mira al Mirandés B como «posiblemente la sorpresa de la temporada».Un equipo «dinámico, peligroso y que, como cualquier filial, tener el fútbol profesional tan cerca les hace más peligrosos».
Precisamente serán los burgaleses los próximos rivales del cuadro de Pepe García, que tras ceder un empate frente al Burgos Promesas 2000, «ante el que merecíamos ganar», valoraba un punto obtenido que permite a los culturalistas mantenerse invictos. Tercera jornada y tercer fin de semana invictos. «Hay que pensar en positivo, ya vendrán épocas peores» reconocía el abulense, que mira ya al duelo del domingo y el largo desplazamiento a Miranda. «Es un handicap» comentaba.
Se desplazará la Cebrereña, no así el Real Ávila, que volverá al Adolfo Suárez, donde precisamente recibirá a un Cristo Atlético con muchos nombres conocidos y que, pese a su dudoso inicio –generan ocasiones pero no goles– tiene potencial para pelear por lo máximo. A partir de las 18,00 horas Trujillo, Aitor o Emilio, entre otros, pisarán el Adolfo Suárez para medirse a un Ávila que espera poder contar con Mouad –el transfer se espera en cuestión de horas– y que buscará una mayor «presencia» con el balón de la que pudo conseguir en Aranda. El objetivo es «seguir madurando una propuesta de fútbol vistoso».