Los niños que todavía no hayan recorrido el paseo del Rastro a lomos de los ‘Aviñecos’ todavía están a tiempo de hacerlo. La vaca, el león, el oso, el tigre y el panda seguirán estando allí hasta «el primer fin de semana de noviembre», que es cuando Faema (Asociación de Familiares de Enfermos Mentales de Ávila) tiene previsto que concluya esta iniciativa que nació con un doble objetivo. Por un lado, ofrecer una alternativa de ocio infantil. Por otro, permitir que dos personas con discapacidad tuvieran acceso a un puesto de trabajo, aunque fuera de forma temporal.

 La directora-gerente de Faema, Inmaculada Pose, hace un balance positivo de la iniciativa al considerar  el «objetivo cumplido» en alusión a la integración laboral de las personas con discapacidad, un colectivo que suele tenerlo especialmente difícil a la hora de trabajar. En este sentido, explica que con los ‘Aviñecos’ «se han cubierto los gastos de contratación de dos personas con discapacidad a media jornada, una de lunes a viernes y otra los fines de semana», lo cual ya es un éxito precisamente porque la finalidad última de la actividad es la integración social de personas con enfermedad mental fomentando su acceso al empleo a través de esta iniciativa novedosa en Ávila.