El nuevo presidente de la Diputación subraya su «compromiso» con todos los pueblos de la provincia

Eduardo Cantalapiedra
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Jesús Manuel Sánchez Cabrera rindió con su discurso de investidura un homenaje a todos los alcaldes y concejales, a los que simbólicamente entregó el bastón de mando de la Diputación

El nuevo presidente de la Diputación de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, habló en su discurso de investidura de «compromiso» con todos los pueblos de la provincia. Unas palabras que se transformaron en un homenaje a todos los alcaldes y concejales, a su juicio, «verdaderos protagonistas de este acto como representantes directos de nuestros pueblos», a los que quiso entregar de manera simbólica el bastón de mando de la Diputación y a los que se dirigió para indicarles que «las puertas de esta institución estarán siempre abiertas para todos y todo el personal de esta casa estará a vuestra disposición, de manera especial el equipo de los 25 diputados provinciales».

Pero además de compromiso, Sánchez Cabrera también habló de «nuevos tiempos para esta institución». «Los ciudadanos de la provincia exigen cambios en la forma de hacer política y que los políticos les escuchemos», afirmó, para añadir que «son tiempos de transparencia, diálogo y consenso, tiempos de compromiso». El presidente subrayó que «nos exigen participación ciudadana en la vida pública y yo les digo que hemos entendido el mensaje y asumimos la responsabilidad de los nuevos tiempos».

Para Jesús Manuel Sánchez, «la regeneración política y la transparencia, la creación de empleo y de oportunidades, así como el apoyo a los servicios públicos de calidad y la protección y apoyo a los más vulnerables» son los «verdaderos pilares» para los próximos cuatro años.

Ante un público que llenaba el patio central de la institución y en el que se encontraban los miembros de la Dirección provincial del PP, con su presidente, Antolín Sanz, al frente, así como el vicesecretario de Comunicación del partido a nivel nacional, Pablo Casado, y diputados nacionales, senadores y procuradores por esta provincia, entre otras personalidades, Sánchez Cabrera manifestó que para él era «un honor» dirigirse a todos ellos como presidente de la Diputación de Ávila y quiso dar las gracias a los diputados provinciales que habían depositado su confianza en él, al tiempo que se puso a disposición de todos los miembros de la Corporación provincial, «independientemente de ideologías» para «trabajar juntos por el futuro de nuestros pueblos y de nuestra provincia» y añadió que «espero estar a la altura».

Su discurso concluyó con un «desde ahora, a trabajar por nuestros pueblos y nuestra provincia», al que siguieron los aplausos de muchos de los allí presentes.