Hay momentos en los que la vida te anima a salir de lo que ahora se llama la 'zona de confort'. En otras ocasiones es la realidad de los acontecimientos la que te empujan a ello. Y en el caso de Alberto San Segundo el 2018 ha comenzado con un poco de ambas. Porque el abulense ha dejado aparcado su Mitsubishi EVO X –quizás ya no lo vuelva a conducir nunca más– . No sólo porque desde hace tiempo busca comprador para un vehículo que no le ha terminado de dar las alegrías que esperaba, sino porque esta temporada el piloto abulense, cinco veces campeón de Castilla y León de Rallyes de Asfalto, ha dado un giro radical a los acontecimientos. Si en el mes de marzo se confirmaba la figura del abulense como el nuevo coche cero en el Campeonato de España de Rallyes de Asfalto, donde comparte el Hyundai i30 Turbo junto al avilesino Salvador Belzunces, el abulense daba un nuevo giro hace apenas unas semanas cuando se anunciaba su presencia en la Peugeot Rally Cup Ibérica.