Objetivo Villaralbo

A.S.G.
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José Luis Diezma, técnico del Real Ávila, reconoce la importancia y necesidad de hacer un buen partido ante los zamoranos • El madrileño confiesa que el equipo está pasando por un momento «duro»

José Luis Diezma, con gesto de enfado, en el encuentro ante la Leonesa. - Foto: Antonio Bartolomé

Son momentos difíciles para el Real Ávila. No acaba de arrancar el equipo de José Luis Diezma, en horas bajas tras un inicio de temporada en el que las sensaciones no son las esperadas. No acaba de adaptarse el renovado vestuario en un inicio de liga en el que «estamos donde estamos –penúltimos con un punto de quince posibles– porque cuando parece que damos un paso hacia adelante en algún aspecto del juego, damos otro para atrás». Un problema con el que se está encontrado Diezma en un momento en el que «no cabe otra cosa que trabajar y lograr que el equipo se muestre compacto. No hay otro camino».

Un reto en el que aparece un partido clave, la visita del Villaralbo (domingo 30 a las 17,00 horas) al Adolfo Suárez. Sumar, imprescindible. Ganar, lo aconsejable. Hacerlo con holgura, lo que desea José Luis Diezma. «Necesitamos un buen partido, resolverlo con holgura, para que los chicos se sientan mejores futbolistas» de lo que muestra ahora la clasificación. En estos momentos «la ansiedad está llevando a la precipitación y los errores, y así es complicado hacer daño a los rivales» analiza el madrileño. La confianza en la capacidad de su vestuario y sus jugadores en inamovible en estos momentos para el técnico encarnado. Sabe y confía en que los suyos serán capaces de revertir la situación, «pero necesitan hacer un buen encuentro para que nos sirva como punto de partida».

Un punto de partida para el que ya se han fijado un objetivo, el Villaralbo. «Por la inmediatez se nos hace muy importante este partido». Lo avisa José Luis Diezma, consciente de que tras la visita de los zamoranos espera el Burgos y el Plantío, una plaza poco recomendable a la que llegar con una nueva derrota en el casillero y, lo que es peor, la moral por los suelos. Ganar en el Adolfo Suárez, ante la afición, es el antídoto que manejan en el vestuario encarnado, donde tienen claro que «no hay que dejar pasar el tiempo». Un partido en el que no sólo mira los puntos el técnico madrileño, «yo quiero mirar más allá y que los chicos hagan un buen partido, para que sean conscientes de hasta dónde pueden llegar, y a partir de ahí poner un listón para trabajar».  No podrá contar con Yagan, operado de una fractura nasal tras sufrir un golpe en el partido ante la Arandina, pero sí con Chiqui y posiblemente con José María, que esta semana empezará a entrenar con el grupo.