Se esperaba viento y lluvia en la provincia y las consecuencias se pudieron ver en algunos municipios abulenses que sufrieron diferentes problemas que llegaron con el que es el primer temporal de un otoño que estaba resultando especialmente suave.

Entre las diferentes situaciones creadas por la climatología, donde se vio una consecuencia directa fue en las carreteras y, de forma concreta, en la N-110, que se vio afectada en dos puntos. Así, lo más destacable fue el corte a la altura de Mediana de Voltoya por la caída de un árbol que derribó el tendido eléctrico poco después de las 10,30 horas, lo que obligó a cerrar la vía. En esta misma carretera hubo un segundo corte, en este caso  en la zona de Poveda.

 También en cuanto a los transportes, se anunciaban retrasos en los trenes de cercanías entre El Escorial y Ávila.

Ya dentro de algunas localidades de la provincia, el temporal dejó a su paso diferentes problemas, como fue el caso de Barromán donde no sólo se cayeron dos árboles, sino que los vecinos veían como también se derrumbaba una tapia y se producían daños en las cubiertas del salón multiusos, aunque afortunadamente sin daños personales.

Donde sí hubo molestias fue en El Herradón donde la caída de un árbol fue más allá y dejó sin luz al municipio desde las 6,00 a las 11,30 horas cuando se recuperaba el suministro eléctrico.

Rachas. Desde la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) se dejaban algunos datos a través de las estaciones situadas en diferentes puntos de la provincia. Según los últimos datos disponibles al cierre de esta edición, las mayores rachas de viento se localizaron en El Barco de Ávila, donde se llegaron a alcanzar los 86 kilómetros por hora. También fueron intensas en otros lugares como Navarredonda, con 81 kilómetros por hora; el puerto de El Pico, con 79, o Arévalo con 78.

En cuanto a la lluvia, aunque no hubo acumulaciones tan destacables como en anteriores ocasiones, sí que se superaron los 53 litros por metro cuadrado en Navarredonda y en la zona del puerto de El Pico.

En cuanto a la previsión para el fin de semana, la Aemet elimina el nivel amarillo de aviso por lo que no se esperan incidencias meteorológicas de importancia. Para el sábado está previsto un cielo nuboso con precipitaciones débiles, que pueden ser localmente moderadas en el Sistema Central, y más frecuentes en la segunda mitad del día.

La cota de nieve se sitúa por encima de 1.800 metros, mientras que no se esperan cambios en las temperaturas nocturnas, manteniéndose entre los 3 y 8 grados. En el caso de las diurnas, irán en ligero ascenso, entre tres y ocho grados, registrándose vientos del este al noreste, de flojos a moderados.