La derogación de la reforma laboral centró las reivindicaciones del Primero de Mayo

Ana Agustín
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Unas 800 personas se manifestaron este Primero de Mayo por las principales calles de la ciudad en respuesta al llamamiento de UGT y CCOO para reivindicar condiciones laborales dirgnas.

En torno a 800 personas se manifestaron por las calles de la ciudad de Ávila en el Primero de  Mayo, fiesta de los trabajadores. Convocadas por los sindicatos UGT y CCOO, se concentraron este viernes en la plaza de Santa Ana  en un colorido y animado afán de reivindicar los derechos de la clase obrera. Las mujeres de Nissan, con sus camisetas rosas, acompañadas por algunos trabajadores de esta factoría en lucha; representantes de la Escuela Pública que forman parte de la Plataforma creada en su defensa con sus camisetas verdes; jóvenes de Juventudes Cristianas, con sus chalecos reflectantes; miembros del comité de empresa de Correos, con sus chalecos azules y sus camisas amarillas; un grupo de CNT, multicolor...; se reunían poco antes de las doce del mediodía dispuestos a emprender un recorrido por algunas de las arterias principales de la ciudad hasta llegar a la plaza del Mercado Chico lugar en el que finalizaría la manifestación tras la lectura de sendos comunicados por parte de los dos responsables de los sindicatos convocantes.

Antes de comenzar la marcha en defensa de la clase trabajadora, Luis Sánchez, secretario provincia de UGT, y Óscar García Barroso, secretario general de CCOO en Ávila, coincidieron en afirmar que se trataba de un Primero de Mayo especial por coincidir con el 125 aniversario del inicio de esta fiesta reivindicativa.

Sánchez afirmó que «hoy seguimos viendo que los beneficios empresariales no repercuten en los trabajadores asalariados». También afirmó que «por mucho que se empeñen algunos en decir que salimos de la recesión, no es verdad porque los asalariados siguen sin tener poder adquisitivo, sus condiciones laborales son precarias y no tienen empleo fijo». Mencionó la congelación salarial de los empleados públicos y el escaso poder adquisitivo de los pensionistas. Las propuestas de UGT se dirigen a los partidos políticos en este año electoral con el fin de que las recojan en sus programas y las cumplan.

Por su parte, Óscar García Barroso, responsable de CCOO en  Ávila, mencionó algunos de los conflictos laborales que afronta la provincia de Ávila, como la situación de Nissan, FCC o Elgorriaga,  además de «otros que no se ven», calificó la crisis de «estafa» y afirmó que en esta provincia pequeña «se siente de una manera más palpable», que contabiliza más de un 20 por ciento de parados, lo que se traduce en 17.000 personas. A estas cifras unió otros datos como que «más de la mitad de esas familias no tienen ningún tipo de ingreso». Una diferencia salarial «bestial» entre los hombres y las mujeres, el ser Ávila una provincia en la que los salarios y las prestaciones «son las más bajas de toda Castilla y León» fueron otras de las razones que García Barroso esgrimió para manifestarse en esta jornada.

Con respecto a los puntos básicos de lucha trabajadora, el secretario general de CCOO afirmó que es fundamental «derogar la reforma laboral» y a partir de ahí, trabajar en políticas «que realmente generen crecimiento económico, que den posibilidad a los trabajadores de acceder a aumentos salariales, que fortalezcan una sanidad y una educación públicas, políticas que, en definitiva, hagan salir de la crisis a quienes realmente la vivimos».

A cerca de las últimas noticias sobre el futuro de Nissan, Luis Sánchez hizo una valoración que reconoció «el ejercicio de responsabilidad por ambas partes» ya que se ha conseguido la retirada del ERE por parte de la empresa y de la huelga, en lo que respecta a los trabajadores. Consideró que es necesario negociar «con lealtad» y defendió la necesidad de una mayor inversión en la factoría abulense.

El coordinador regional de IU  y procurador en Cortes, José María González, se encontraba presente también en esta manifestación y antes de iniciar el recorrido reivindicativo expresó que «este es un Primero de Mayo de fiesta pero, sobre todo de reivindicación». Puso de manifiesto la reflexión de esta jornada que se basaba en «la coincidencia en el tiempo de la unidad de los trabajadores de Nissan, que han sido capaces de forzar a la empresa a dar marcha atrás» y su presencia en la calle en esta jornada. «El poder político representado por el PP y el poder económico han quitado los derechos a los trabajadores» y finalizó sus palabras exigiendo trabajo «con dignidad». Otros representantes políticos de IU, PSOE, Ahora Decide o Podemos se dieron cita también en la protesta. Pasadas las 12 del mediodía comenzó la marcha que en su recta final, en el Mercado Chico, tuvo momentos emotivos tras los discursos sindicalistas. García Barroso afirmó que «esta provincia se desangra viendo cómo hay más de 17.000 parados» y también recordó las palabras de Eduardo Galeano cuando afirmó que «hay dos clases de hombres, los indignos y los indignados y hoy estamos aquí los segundos». Los aplausos de las casi 800 almas reunidas pusieron el punto y final a esta jornada. Sin embargo, como viene siendo habitual cada Primero de Mayo, el sindicato UGT homenajeó a su fundador, Pablo Iglesias en la plaza de la Casa del Pueblo, donde se levanta un busto en su memoria. Lo hizo depositando un ramo de flores, con un pequeños discurso y el canto de la Internacional.