El director general de Planificación e Innovación de la Gerencia de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Rafael Sánchez Herrero, participó este viernes en la mesa redonda ‘Dibujando el escenario futuro de la investigación enfermera’, organizada al amparo del VII Encuentro de Investigación en Enfermería de Castilla y León.
Muy optimista y esperanzado respecto al futuro de la profesión en lo que a labor de investigación se refiere, Sánchez Herrero recalcó que «en el campo de la enfermería, que es muy amplio, hay mucho que investigar, tanto a nivel de gestión, como de organización y asistencial».
Por ello, y aunque como reconoció, «la enfermería se ha incorporado tarde» al campo de la investigación, «va con carrera y con velocidad». De hecho, aseguró que «la enfermería enCastilla y León tiene una producción científica muy importante». Importante en cantidad y, dijo, en calidad. No en vano, aseguró que «en las convocatorias se hacen evaluaciones externas por el InstitutoCarlos III y enfermería compite de una forma muy a tener en cuenta. Los proyectos que se seleccionan son de excelencia y ahí está enfermería».
En su charla con Diario de Ávila, el director general de Planificación e Investigación puso sobre la mesa el «impulso» que en materia de investigación se realiza desde la Junta de Castilla y León. «Hemos hecho una apuesta por ella», abundó en sus palabras, «de hecho, no se ha perdido el presupuesto dedicado a investigación en los últimos años, y encima podemos decir que tenemos unos grandes profesionales con unos grandes resultados a nivel nacional. Castilla y León ocupa un lugar de producción científica interesante».
Y al igual que hiciera el jueves el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, Sánchez Herrero también se refirió a las convocatorias de intensificación sacadas este año. «Esto significa que todos aquellos que son investigadores y asistenciales, gracias a esta convocatoria se subvenciona un sustituto para que puedan disponer del tiempo que dedican a la asistencia a la investigación», aclaró, y citó a las enfermeras seleccionadas para dos de las diez plazas convocadas. «Creo que es un paso importante y muy bien acogido», dijo.
Junto a él intervino la jefa de la Unidad de Apoyo a la Investigación en Enfermería del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, Ana García Pozo, quien subrayó la necesidad de que las enfermeras adopten «un rol investigador en igualdad de condiciones» respecto a otras disciplinas, como la Medicina.
En este sentido, el escenario hacia el que debe caminarse ha de ser «simétrico, dinámico», dijo. «Cuando somos investigadoras principales debemos asumir el liderazgo teniendo claro cuál es nuestro rol en ese proyecto», avanzó Ana García Pozo. «Y cuando nosotras seamos colaboradoras dentro de un proyecto liderado por otra disciplina, que suelen ser médicos, tenemos que llegar a un pacto para determinar qué aporta la enfermería, cuál va a ser mi rol y cuál va a ser mi compensación, pero no económica, sino curricular, de publicaciones, etc.», detalló.
Por el contrario, lo habitual es que aún en investigaciones interdisciplinares «era el médico el que presentaba un ensayo clínico del que se inforaba a la enfermera, se le indicaban las tareas que tenía que asumir y, una vez que las hacía, desaparecía del proyecto», lamentaba Ana García, quien subraya la necesidad de que el papel de ambos sea «de igual a igual».