El jugador y capitán del Barcelona, Andrés Iniesta, aseguró, en la madrugada del pasado miércoles, que deben ser «positivos» tras la gira de pretemporada en Estados Unidos, donde han ganado a los Los Ángeles Galaxy (2-1), perdido ante el Manchester United (1-3) y empatado contra el Chelsea (2-2, aunque cayeron en los penaltis 2-4), y reconoció que todavía tienen aspectos que mejorar.

«Hay cosas buenas y otras no tanto, como en todos los inicios. Seguimos intentando prepararnos de la mejor manera mediante entrenamientos y partidos y, más allá de los resultados, creo que debemos estar contentos. Una vez en casa, a seguir trabajando, que es importante», comentó.

 Sin duda, la «peor noticia» para el centrocampista es la lesión muscular de Douglas, que estará unas ocho semanas de baja. «Es un momento complicado, porque estaba jugando y esperamos que vuelva bien y pronto», apuntó.

«Llevamos 20 días de entrenamientos, pero ahora llega la competición y estamos en ello. Todo sirve para preparar, pero siempre quieres estar en las mejores condiciones», argumentó.

Suárez y Sandro. El Barcelona se despidió de la gira por Estados Unidos con un empate (2-2) en el tiempo reglamentario ante un Chelsea al que remontó de forma estéril con bellos goles de Luis Suárez y Sandro, aunque finalmente perdió en los penaltis (4-2)

El tanto que abrió el marcador fue una demostración de clase de Hazard, candidato al Balón de Oro para su técnico, José Mourinho. El belga protagonizó un vertiginoso eslalon en la frontal del área, con el que se deshizo de hasta tres defensores, antes de depositar el balón en la portería de Ter Stegen.

Aunque el campeón inglés pudo sentenciar en un mano a mano de Diego Costa con el portero ‘culé’, fue el Barça quien empató. Suárez, líder de la delantera azulgrana ante la ausencia de Messi y Neymar, marcó un polémico gol fantasma tras elevar el esférico por encima de Courtois.

Tan solo 10 minutos después, el canterano Sandro recibió una apertura de Rafinha en la banda y, tras caracolear, disparó con rosca a la mismísima escuadra. Imparable para Courtois.

El carrusel de cambios desconcertó al bloque catalán, que vio cómo Cahill empató a falta de cinco minutos tras una mala salida de Masip en un saque de esquina. El arquero ‘despejó’ la cabeza del defensa, en lugar del balón, que se alojó mansamente en su portería.

El partido acabó por decidirse en los penaltis, en la que los errores de Halilovic y Piqué dieron la victoria al Chelsea. Tras el duelo, el equipo de Luis Enrique regresó a casa y mañana volverá al trabajo, en el que la principal novedad será la participación de Neymar y Alves.