El Ministerio de Finanzas de Rusia comenzó ayer a vender reservas de divisas para apoyar el rublo, que en los últimos días sufrió importantes caídas. En total, pueden destinarse a este fin una existencias por valor de 7.000 millones de dólares, según su portavoz.
La moneda reaccionó de inmediato a este anuncio y ganó un cinco por ciento respecto al dólar en comparación con el pasado martes. El billete verde se pagaba ayer a 64 rublos, por debajo de los 80 a los que llegó a cotizar. La decisión del banco de Rusia de elevar los tipos de interés del 10,5 al 17% no surtió el efecto esperado.
La entidad financiera informó de que el pasado 15 de diciembre llevó a cabo intervenciones en el mercado de moneda extranjera por importe de 1.961 millones de dólares, lo que elevó a más de 80.000 el volumen de su defensa del rublo en lo que va de año.
El rublo subió en la jornada de ayer con fuerza tras las nuevas medidas adoptadas del Banco de Rusia. Su cotización en el parqué moscovita frente a las principales monedas internacionales hizo que se alzara un 14,41% y se viera reforzada por una serie de decisiones de la institución presidida por Elvira Nabiullinadel dirigidas a estabilizar el sector financiero, que incluyen un mayor suministro de liquidez en divisas a los bancos, así como también para el saneamiento del sector en 2015.
El primer ministro Dmitri Medvedev descartó una limitación del mercado de divisas a los inversores. Por su parte, en la Comisión Europea se mostraron «muy preocupados» por la caída del rublo y la crisis económica, destacando que «a nadie le interesa que esta economía caiga en una profunda depresión», apuntaron círculos del Ejecutivo comunitario en Berlín.
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) se ocuparán durante la cumbre de hoy en Bruselas de esta crisis, conscientes de que parte de la presión que sufre se debe a las sanciones impuestas por la UE y EEUU a Putin por su postura respecto al conflicto ucraniano.
Según estas fuentes comunitarias no se prevé que se adopten nuevas sanciones contra el país. Sin embargo, los ministros de Exteriores europeos están de acuerdo en ampliar la lista de personas sancionadas con más nombres de Crimea y del este de Ucrania.
Medvedev subrayó que la actual situación de su moneda en los mercados no refleja fielmente el verdadero estado de la situación en la nación y aseguró que «cuenta con recursos suficientes para afrontar las necesidades que precise su sistema.
En este sentido, el primer ministro también remarcó que ni los ciudadanos ni los bancos ni la economía necesitan este tipo de inestabilidad, aunque admitió al mismo tiempo que «carece de sentido» imponer regulaciones «extremadamente duras» en este ámbito. «Nuestros siguientes pasos deben sustentarse en mecanismos de mercado», zanjó.