Los hogares de Castilla y León son los que menos medidas toman para proteger su futuro económico de toda España. De hecho, el 61,5 por ciento no cuenta con ninguna solución de protección familiar, una cifra superior a la media nacional del 49,1 por ciento. Además, los ciudadanos de la Comunidad apuestan más por el ahorro y menos por los seguros de vida para hacer frente a imprevistos, como la muerte del cabeza de familia o la invalidez por accidente.

 

Así se desprende del estudio marco ‘La cultura financiera de la familia española, el ahorro y sus medidas de protección’, presentado ayer en Valladolid por el director del Instituto para la Protección Familiar, Eduardo Creagh; la responsable territorial de seguros del Banco Santander en Castilla y León, Yolanda García, así como la representante de la alianza Aegon-Santander Maite Ruiz. Se trata de una iniciativa del centro de estudios sociológicos Análisis e Investigación y la Universidad Rey Juan Carlos.

 

En este sentido, Creagh destacó que su objetivo es poner de manifiesto el nivel de cultura financiera de los castellanos y leoneses, como un factor determinante a la ahora de adoptar medidas de protección familiar, con el fin de sensibilizar a la sociedad en este sentido y contribuir a la planificación del futuro económico. El director del Instituto destacó que el 17,4 por ciento de los encuestados ha sufrido en su familia una situación dramática y advirtió de que el 47,6 por ciento, no tenía ningún producto para hacer frente a la situación.

 

Primer hijo. De hecho, la mitad (51,5 por ciento) de las familias castellanas y leonesas con hijos menores no disponen de instrumentos de protección privada que les permitan afrontar las consecuencias económicas de dramas imprevistos, lo que representa un nueve por ciento más que el conjunto nacional. Creagh remarcó que el nacimiento del primer hijo es el momento vital que más ilusión, miedos e inseguridad genera a los cabezas de familia, ante la responsabilidad de garantizar una estabilidad económica al hogar.

 

El informe, que parte de los resultados del Libro Blanco sobre protección familiar y seguros de vida riesgo, analiza las causas de la carencia en medidas de protección detectadas en España el pasado año, frente a otros países del entorno. Creagh sostuvo que están vinculadas a la renta per capita de las familias, al nivel de protección que ofrece el Estado, la idiosincrasia del pueblo español, la cultura financiera y la situación de crisis. También, la investigación explora las medidas de protección más habituales, identifica a los prescriptores y las principales preocupaciones y expectativas económicas.

 

Las técnicas cualitativas de este estudio se llevaron a cabo durante mayo y junio de este año. Han consistido en un panel ‘on line’ de 21 días de duración con 32 cabezas de familia, 12 entrevistas en profundidad y cuatro ‘focus group’.