Belén Rosado, procuradora de Ciudadanos en las Cortes de Castilla y León por la provincia de Ávila, denuncia el «nulo compromiso y empatía» de la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León con la conciliación laboral y familiar y, en concreto, con la educación en valores y la reagrupación escolar. Según expuso en rueda de prensa, en el arranque de este curso escolar hay 16 familias de la provincia de Ávila que no han podido beneficiarse de la reagrupación escolar de sus hijos, al menos en los términos que hubieran querido, una situación que se da en la comunidad y que está siendo más acuciante en «Ávila y Burgos». 

La procuradora, que compareció ante los medios junto a una madre afectada, explicó que lo que están pidiendo es que la Junta atienda a la «excepcionalidad de la ratio de alumnos» que, afirmó, se contempla en la Lomce, algo que en este caso concreto «ni siquiera se ha estudiado» y que «en comunidades como Madrid sí se está aplicando».

Y es que el problema expuesto por Ana Blázquez –la madre de una familia con cinco hijos trasladada desde Madrid– es que el mayor de los tres hijos para los que ha pedido escolarización en la capital abulense no tiene plaza disponible en este curso en los colegios solicitados en las primeras posiciones (Comuneros de Castilla, Milagrosa-Las Nieves y Colegio Diocesano), con lo que en esos centros los tres hermanos no pueden ir juntos. No obstante, la afectada reconoció que desde la Junta les ofrecieron dos colegios públicos que sí tendrían plaza para los tres niños, el Claudio Sánchez Albornoz y el Reina Fabiola, algo que la familia ha rechazado amparándose en el derecho a la libre elección de centro, al no encontrarse entre sus preferencias.