Los ministros de Economía de la eurozona y la Comisión aseguraron ayer en Riga (Letonia) que no hay ningún plan B para Grecia, y que el único escenario que se contempla es llegar a un acuerdo con el nuevo Gobierno de Syriza sobre un plan de reformas que permita desbloquear un tramo de ayuda urgente del rescate para hacer frente a sus crecientes problemas de liquidez, de forma que Atenas pueda seguir en la eurozona.

El Eurogrupo salió así al paso de las declaraciones del ministro de Finanzas esloveno, Mramor Dusan, que, durante la reunión del pasado viernes, reclamó un plan B por si hay un impago de Grecia en las próximas semanas. «De lo que trataba mi intervención es de qué haremos si no llegamos a una conclusión o a un nuevo programa a tiempo para que Grecia pueda financiarse o mejorar la liquidez, y eso fue todo. El programa alternativo puede ser cualquier cosa», se justificó.

«Hay una única estrategia, que es Grecia en el euro, Grecia en Europa, y todo el Eurogrupo es favorable a esa opción. Así que solo discutimos de un único plan», recalcó el ministro de Finanzas francés, Michel Sapin.

Yes que los responsables del Eurogrupo criticaron el pasado viernes, y de forma unánime, al ministro heleno Yanis Varoufakis por sus tácticas dilatorias en las negociaciones y su resistencia a dar información a los técnicos de la troika sobre la situación presupuestaria en Atenas. Le avisaron de que el tiempo se acaba y le exigieron que acelere el plan de reformas al que se ha comprometido. Yes que hay 7.200 millones de euros en juego. «Le han machacado», comentó una fuente presente en la reunión.

Horas después, el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, reiteró enérgico que el debate fue «crítico», e indicó que confía en que ello añada una «urgencia extra al proceso».

También el comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, admitió que la discusión fue «clara y firme», y que «todos los países miembros de la eurozona, los 18 más las instituciones, comunicaron la misma cosa al señor Varoufakis y al Gobierno griego: ahora hay que hacer las reformas. Es lo que pedimos».

En la misma línea se expresó el titular de Economía, Luis de Guindos, que ayer avisó de que el tiempo que queda para alcanzar un acuerdo con Grecia sobre el plan de reformas que permita desbloquear ayuda urgente por parte del Eurogrupo es «muy corto», por los problemas de liquidez del Gobierno de Atenas y la creciente fuga de depósitos de la banca de ese país.

«Las cosas no pueden continuar como se estaban desarrollando», resaltó el madrileño. En su opinión, el nuevo formato de diálogo impuesto por el Ejecutivo de Syriza     -que obliga a que las negociaciones políticas se desarrollen en Bruselas y las técnicas en Atenas- «no está dando resultados», y la pretensión de Atenas de «ir tomando medidas sueltas» en lugar de un plan completo de reformas pactado con la troika «no es aceptable».