Sin opciones en Soria

Área 11
-

3
Numancia B
0
Real Ávila
Finalizado
El Real Ávila caía ante el Numancia B en un duelo que los sorianos dominaron con claridad desde el inicio

El Real Ávila no pudo sacar nada de provecho de su visita al Numancia B, que se impuso por 3-0 gracias al acierto de marcar en los momentos claves del partido, entre ellos los primeros minutos de ambas partes. La victoria de los sorianos pone tierra de por medio entre dos equipos que luchan por estar en puestos de playoff, carrera en la que el filial numantino, que tiene un partido pendiente, le saca ahora seis puntos de ventaja al conjunto abulense.

En su paso por la Ciudad Deportiva Francisco Rubio el Real Ávila no estuvo acertado y se vio superado en todas las facetas del partido por parte del equipo local, que a los dos minutos ya se puso por delante en el marcador. Una buena jugada de Guillermo por banda habilitó a Silva, que tras verse beneficiado por el resbalón de su marcador culminó la jugada con un remate que batió a Alberto.

Tras la tempranera desventaja en el marcador, el Real Ávila trató de resarcirse y en cierto modo lo logró, ya que se adueñó del balón y del control del juego en una fase de buen fútbol que no encontró el gol. Bien al contrario, fue el Numancia B quien, agazapado detrás y saliendo a la contra, llevó más peligro al área rival del que crearon los abulenses desde el dominio del juego.

Mediado el primer tiempo, una aproximación soriana terminó en penalti al llegar el local Beli antes que Issa a un balón dividido dentro del área. El colegiado no dudó en señalar el punto fatídico y Vallejo transformó la pena máxima para poner el 2-0 en el marcador. Una montaña ya  muy difícil de escalar para los hombres de Jonathan Prado, que se vio obligado más pronto de lo que creía a subir líneas y tomar riesgos en defensa.

Álex Huerta se percató que al Ávila le costaba cada vez más volver a su retaguardia y ordenó a su equipo jugar balones largos que pudieran sorprender a la defensa visitante, especialmente en llegadas por las bandas que buscasen un remate óptimo en el área. Beli tuvo el tercero para los locales, pero su disparo se marchó muy alto con todo a favor y el portero Alberto ya batido en el suelo.

El Real Ávila se descomponía ya que tan sólo la línea de atrás era capaz de poner ligera resistencia a las acometidas sorianas, que no fueron numerosas pero sí llevaron mucha sensación de peligro. La mejor ocasión abulense antes del descanso la tuvo Oli, pero su lanzamiento desde la frontal del área fue detenido por un bien colocado Taliby.

En la reanudación y tal como había sucedido en la primera mitad, el Real Ávila volvió a encajar un gol pronto. A los cinco minutos, un activo Guillermo jugó por banda, su centró circuló por el área sin que nadie lo despejara y Beli, aprovechando que le llegó una pelota que no esperaba, no perdonó en el remate a puerta. Fue el mazazo definitivo para un Real Ávila que demostró una vez más que en el fútbol una cosa es tener más posesión y dominio territorial y otra bien distinta acertar en el plan de partido para materializarlo en goles. Los tres que se marcaron en Soria fueron del Numancia B, que tuvo siempre más claro que era lo que le convenía.

Aun así, el Real Ávila siguió intentando poner cerco a la portería de Taliby, que se vio obligado a hacer un par de buenas intervenciones para que los de Prado no recortaran distancias en el marcador. El Numancia B siempre quiso salir en jugadas rápidas mientras los abulenses optaban por una conducción de balón que se fue volviendo imprecisa con el paso de los minutos, fruto del cansancio físico y del abatimiento moral por el resultado.

Las contras del Numancia B eran peligrosas y podrían haber ampliado la diferencia, especialmente en un centro-chut envenenado de Guillermo que entre Alberto y el poste evitaron que se convirtiese en el cuarto gol de la tarde. Tampoco Ferrer por dos veces, primero en un remate de cabeza y después tras un nuevo centro de Guillermo que remató libre de marca, acertó a batir de nuevo el marco del Ávila, que si hasta el 3-0 bien podía decirse en su descarga que encajaba un marcador demasiado contundente a tenor de lo visto en el terreno de juego, en los minutos posteriores al tercer gol se salvó de recibir una goleada todavía mayor.

Mediado el segundo tiempo Jonathan Prado ordenó a su equipo presionar más arriba la salida de balón del Numancia B, cosa que conllevó alguna ocasión del Ávila. Moha, incorporado en la segunda mitad, estuvo algo lento y permitió que el local Oli llegara antes para arrebatarle el disparo. Otra buena ocasión visitante llegó en una falta lateral que acabó sin embargo a manos de Taliby. La réplica local la dio Beli, que mandó un lanzamiento de falta a escasos centímetros del larguero.

Ya en la recta final el local Marcos hizo falta en la frontal del área. Raúl ejecutó el libre directo pero su disparo se marchó alto en lo que fue el último intento del Real Ávila por maquillar el resultado de un partido que había perdido mucho antes.