El plan de bioeconomía agroalimentaria creará 1.000 empleos

SPC
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La Junta estima que el sector podría incrementar su volumen de negocio en 774 millones anuales durante las próximas dos décadas en la Comunidad

La consejera de Agricultura, Milagros Marcos, presentó el plan ante agricultores y empresarios del sector - Foto: E. Margareto (Ical)

La consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, presento ayer las líneas básicas del nuevo plan de impulso a la bioeconomía agroalimentaria, una iniciativa que prevé una inversión de cinco millones anuales para fomentar líneas de investigación que permitan incrementar la producción del sector primario y agroalimentario de Castilla y León, y hacerlo de una manera más sostenible de los recursos biológicos, la minimización de residuos y emisiones y el desarrollo de nuevas aplicaciones. Con este modelo, la Consejería de Agricultura y Ganadería estima que podría alcanzarse un volumen de negocio de 774 millones adicionales al año, así como crear 10.000 empleos hasta el año 2030, el 80 por ciento de ellos en el entorno rural.

Estas estimaciones se obtienen a partir de un simulador europeo y teniendo en cuenta que Castilla y León aporta a la industria agroalimentaria española un diez por ciento de la cifra de negocio, así como un 12 por ciento de la producción final agraria. Todo ello hace prever la generación de 10.000 nuevos empleos durante las dos próximas décadas, así como incrementar los ingresos del sector agroalimentario en 774 millones cada año.

Para Marcos, la bioeconomía se ha convertido «en necesidad» y al mismo tiempo en «una oportunidad» para el futuro de la alimentación y la agricultura de Castilla y León. La consejera ve «grandes retos» por lo que apuesta por hacer «una oportunidad» para el sector y así poder generar actividad y empleo, en especial en las zonas rurales. «Se trata de producir más, contaminar menos innovando y aprovechando lo que ahora no se aprovecha», demandó, según informa Ical.

La consejera aludió a tres objetivos clave en Europa que se persiguen a través de la adopción de 14 medidas concretas durante este año. Entre los fines de este proyecto se encuentran el incremento y refuerzo de los sectores con base biológica, la implantación rápida de la bioeconomía en toda Europa y la protección del ecosistema o entendimiento de las limitaciones ecológicas de la bioeconomía.

Dos fases.

El plan consta de dos fases, aunque la primera ya está en marcha desde 2016 y ahora se verá reforzada con este plan, elaborado tras llevar a cabo contactos con más de 150 empresas y agentes del sector (agrario, ganadero e industria) y trabajar con 40 institutos de investigación y centros tecnológicos, así como universidades.