Ha coincidido en el tiempo y de algún modo ha beneficiado al Ayuntamiento. La empresa de bricolaje Aki había pedido permiso al Consistorio para talar dos árboles situados justo a la entrada de su comercio, casi a la vez llegaba un informe técnico del área de servicios a la ciudad por el que se apuntaba la necesidad de retirar los tocones de los negrillos que en su día se ubicaron en las plazas de la Santa y San Vicente dado que tiempo después de su corta, los restos apuntan a que la grafiosis que motivó su desaparición seguía latente.

Es por esto que en la Junta de Gobierno se ha decidido que Aki pueda cortar los dos ejemplares que interrumpen el acceso a la tienda a cambio de que provea al Ayuntamiento de otros dos para ubicarlos en el espacio libre que dejen los tocones una vez se retiren. Ahora bien deberán ser ejemplares de al menos seis metros de altura y serán bien de castaño, roble o similar. La plantación la llevaría a cabo el Servicio Municipal de Jardines.