Entrenamiento de Primera

A.S.G.
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El Real Ávila disputó un amistoso ante el Rayo Vallecano en el estadio de Vallecas, en un encuentro que se decantó a favor de los de Paco Jémez tras los goles de Abdoulaye, Miku, Trashorras y el doblete de Adrián Embarba

Rayo Vallecano 5-0 Real Ávila

Rayo Vallecano: Cobeño, Tito, Abdoulaye, Ze Castro, Insua, Jozabed, Baena, Lica, Álex Moreno, Bueno y Miku. En la segunda mitad jugaron Toño, Quini, Amaya, Morcillo, Nacho, Fatau, Trashorras, Pozuelo, Embarba, Aquino, Manucho e Isi.

Real Ávila: Darío, Josito, Marco, Edu Cruz,  Llorian, Miguel, Perdi, Álex, Vitolo, Nata y Dela. También jugaron Esteban, José María, Javi, Óliver, Dani, Kilian, Bruju, Cintrano y Zaka.

Goles

1-0. Minuto 37. Abdoulaye; 2-0. Minuto 45. Miku; 3-0. Minuto 63. Trashorras; 4-0. Minuto 85. Embarba; y 5-0. Minuto 90. Embarba

Incidencias

Encuentro amistoso disputado en el municipal de Vallecas ante cerca de 500 aficionados, unos 100 de ellos abulenses.

No era una jornada para ganar ni demostrar nada a nadie. Las batallas en las que ahora mismo debe poner todo su empeño el Real Ávila están en otras partes. Por ello la tarde del jueves fue una jornada para disfrutar. Porque no todos los días se puede jugar en un campo de Primera, con una afición de Primera –para ser un amistoso ante un equipo de Tercera la entrada fue más que aceptable- y ante jugadores de Primera.

Porque el equipo de Paco Jémez salió de inicio con un once con jugadores tan conocidos como Alberto Bueno –quizás el más esperado y el más desapercibido- Ze Castro, Abdoulaye o Miku, cuya calidad es inversamente proporcional al estado de forma con el que ha desembarcado en el equipo rayista. Aún así sería suya la primera ocasión del partido cuando se lanzaba en plancha –minuto 7- pero el remate se le escapaba fuera. La técnica no siempre está reñida con el estado de forma, aunque ayuda.

Tuvo el Rayo su primera ocasión y el Real Ávila su única. Lo normal dentro del guión que se espera para un encuentro donde, además, el equipo encarnado tenía la orden de no forzar. No es momento de perder efectivos por el camino cuando a la vuelta de la esquina hay algo más que dos encuentros vitales para la salvación. Dela, extremo izquierdo por delante de Llorián –quizás una prueba a tener en cuenta de cara al fin de semana-, apretó a Tito y de su robo Nata sacó un disparo cruzado –minuto 14- que se marchaba fuera con demasiada rosca.

A partir de ese momento el balón y los goles serían del Rayo. Lica o Miku acumulaban oportunidades mientras Abdoulaye –minuto 17- daba un primer aviso de su envergadura al saque de un córner. Al segundo no fallaría. El central hacía el 1-0 en el minuto 37 en un nuevo saque de esquina. Ni Edu Cruz, apagafuegos ante las embestidas rayistas, pudo con el central, cuya figura se hizo imponente. En  esos momentos el Ávila ya estaba en medio de un carrusel de cambios. Cintrano, Dani y Bruju entraban al campo en la recta final de una primera mitad que Miku cerraría con el 2-0 tras aprovechar una sucesión de rechaces en el área encarnada.

Cambió la encarnada por la amarilla el Real Ávila y el Rayo a todo su once. Donde antes estaban Alberto Bueno o Miku ahora estaban Manucho o Trashorras, que precisamente era el encargado de hacer en el 63’ el 3-0.

En esos momentos el equipo abulense había perdido el ímpetu de los primeros minutos. El gusto por jugar ante un Primera había pasado ya de largo. Sin balón, no había ocasiones. El equipo de Jémez ya era el dueño de los tiempos y de las ocasiones y Adrián Embarba, en el 85’, haría el 4-0 después de una gran jugada en profundidad por banda derecha que terminaba en el fondo de las mallas. El encuentro se cerraría con el quinto y segundo de Adrián, cuando el árbitro pitaba el final del partido.