El Villarreal calienta la Liga

AGENCIAS
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El Madrid solo puede empatar ante el 'submarino amarillo' y ya tiene al Barça a dos puntos (1-1)

El Real Madrid no consiguió ayer pasar del empate ante un gran Villarreal en un choque en el que los blancos lo intentaron todo sobre el césped del Bernabéu, pero no fueron capaces de llevarse el triunfos, con lo que ven acercarse a dos puntos al Barcelona.

Salió el bloque ‘merengue’ con la idea de adueñarse del esférico, conocedor del buen juego combinativo de su rival. Con las líneas avanzadas y presionando en campo rival, el equipo blanco procuró dominar desde el inicio. Rondando el minuto 10, gracias a un saque de esquina, los de Carlo Ancelotti acercaron el peligro a la portería defendida por Asenjo, aunque sin fortuna. En la siguiente acción, el club de Castellón demostró que no había venido a pasearse a Chamartín y obligó a Casillas primero y a Carvajal después, a evitar el primer gol de la noche.

Después del susto inicial, los locales continuaron con su particular monólogo, avisados ya de la velocidad de los hombres de arriba del Villarreal. Así, se cumplió la media hora, con un Madrid que no cejaba en su empeño y siguió insistiendo en una posesión que no daba frutos. La ocasión más clara de la primera mitad la tuvo el central Raphael Varane, otra vez a balón parado, pero el francés no acertó en su remate.

 Al final, sin goles acabó una primera parte que se desarrolló, principalmente, en el centro del campo, con un Madrid queriendo y teniendo el balón ante un Villarreal dispuesto a entregarle la responsabilidad de atacar y consciente de la necesidad ‘merengue’ de conquistar los tres puntos para recuperar la ventaja con respecto al Barça. Los equipos se marcharon a vestuarios con la sensación de poder haber anotado al menos un gol, pero con los deberes por hacer en los segundos 45 minutos.

Más verticalidad. El regreso de vestuarios trajo a un Madrid más directo. Lavado de imagen que se reflejó en los primeros compases de la segunda parte. Benzema robaba un balón en el círculo central y le cedió el balón a Cristiano que cruzó su disparo, pero se encontró con la manopla de Asenjo. En la siguiente jugada, el luso volvió a ser el protagonista. El central castellonense Bailly agarró al actual Balón de Oro dentro del área provocando un claro penalti que transformó el siete del Madrid para poner por delante a su equipo.

Pareció crecerse el cuadro de Acelotti, que, aprovechando la inercia del gol, volvió a plantarse en la meta contraria hasta en dos ocasiones. Primero, Ronaldo se topó con el guardameta en un mano a mano y, después, Bale mandó alto un disparo desde la frontal. El tanto encajado pareció anestesiar a un Villarreal que, con un cuarto de hora disputado en el segundo período, dio entrada a Vietto y Manu Trigueros.

 Sustituciones con las que acertó Marcelino ya que, apenas tres minutos después de la entrada en el campo de sus dos jugadores, el ‘submarino amarillo’ logró igualar el choque. La primera aparición de Vietto provocó una indecisión en la zaga local de la que se aprovechó Gerard, que superó a Casillas con un gran zurdazo. Así, volvía todo a su lugar de origen y con la necesidad del Madrid de seguir remando para no dejar escapar los puntos del Bernabéu.

Pitos a Ancelotti. A raíz del empate Cristiano se echó el equipo a sus espaldas y tuvo la oportunidad de firmar un doblete. Lo intentó el delantero, pero siempre se encontró con un gran Asenjo. Sería el argentino Vietto, omnipresente desde su entrada en el terreno de juego, quien volviese a asustar a una afición blanca, que se impacientó con sus jugadores y que la tomó con su entrenador tras el cambio de Isco, un tanto desaparecido, por Illarramendi.

En los últimos cinco minutos el partido se rompió, el ritmo creció y ambos equipos buscaron el gol. Jesé desaprovechó una mala salida de Asenjo y, acto seguido, Casillas evitó el segundo del Villarreal con una gran estirada a un disparo de Vietto.