Juan Novo periodista madrileño y con relación veraniega en Las Navas del Marqués presentó esta tarde su primera novela, ‘Todas las casas son ojos’, una novela con una vinculación abulense, pues parte de la trama se desarrolla en la Guerra Civil en la zona de Las Navas del Marqués. Junto al autor estuvieron Álvaro Mateos, periodista navero y Sonsoles Sánchez Reyes. Mateos se encargó de presentar la obra y al autor. “Es una novela sobre tres generaciones de mujeres: las que padecieron la guerra, las que vivieron el franquismo y la actual, la del momento que vivimos”.

La primera novela de Juan Novo toma el título de un poema de Miguel Hernández que, según el autor, encontró por casualidad mientras escribía esta novela. Se da la casualidad que Miguel Hernández también estuvo combatiendo en el frente “Este verso refleja muy bien el espíritu de la novela: en ella hay situaciones oscuras y ví que era el adecuado porque la novela habla precisamente de una historia oscura que Luisa, la protagonista, quiere redescubrir o rememorizar, porque lo ha olvidado. Es un asesinato que ocurre en 1939. Quiere saber porqué ella sale viva de esa matanza de la que es testigo”.

El autor ubicó una parte de la novela en la zona de Las Navas y de la Ciudad Ducal porque pretendía ofrecer “un homenaje a mi infancia y a mi vida. He pasado todos los veranos. Se puede decir que no he nacido allí porque nací en enero, porque si hubiera nacido en junio seguramente sería navero”.

Cuando Luisa descubre porqué había podido suceder todo esto lo hace en una copia de un cuadro de Goya en una casa de la Ciudad Ducal, en las Navas del Marqués. “A mí Ávila siempre me ha atraído mucho, desde que era pequeño. La provincia de Ávila y, sobre todo Las Navas del Marqués, donde pasamos los veranos más bonitos entre bicicletas, carne y morcilla navera, que es excepcional. Antes, de pequeño salía por los caminos en bicicleta y ahora puedo salir a correr por esos pinares y esos paisajes únicos”.

Es su primera novela publicada. Reconoce que tiene otra obra que escribió, pero no la publicó, porque, según reconoce, “es muy mala”. Pero sostiene que “me sirvió para saber cómo estructurar una novela. Fue un ensayo y ya me lancé con esta otra”