Ávila se pone las ruedas

A.S.G.
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Más de 300 personas se dieron cita en la mañana del domingo en el VII Día del Patín, organizado por CD Vettonia Hockey

VII Día del Patín - Foto: Javier Ventosa

• El centro de la ciudad se convirtió por momentos en una gran pista de patinaje donde muchos pudieron acercarse por primera vez a un deporte que gana adeptos.

 

Al buen tiempo, buena cara. Y si es sobre ruedas, mejor. Al menos así debieron pensarlo los más de 300 participantes que se dieron cita en la mañana del domingo en la celebración del VII Día del Patín, una jornada que superó todas las expectativas –se esperaban en torno a unos 250 patinadores– y que, como en ediciones pasadas, se convirtió en una fiesta deportiva donde, en este caso, el hockey y el patinaje  se acercaron tanto a pequeños como a adultos –fueron muchos los que se unieron a los más pequeños de la casa en esta actividad– en la cita organizada nuevamente por el ClubDeportivo Vettonia Hockey.
Una mañana que amenazó lluvia, pero en la que el tiempo acabó respetando una jornada en la que los organizadores no podían sino mostrar su «satisfacción» por la acogida de la misma. Y es que el objetivo que persigue el Club Deportivo Vettonia Hockey con esta actividad, que tomaba el relevo a las jornadas de puertas abiertas que se han venido realizando, era «dar a conocer un deporte que, cada día, tiene una mayor acogida entre las disciplinas deportivas de la ciudad». Y es que es un hecho probado que cada temporada que pasa el hockey es una de las disciplinas deportivas que más están creciendo en la ciudad, por lo que desde  los clubes de hockey se reclama la necesidad de mejorar las instalaciones en las que se practica este deporte.
Por lo pronto, el Día del Patín cumplió con las expectativas, mostrando un deporte «para muchos desconocidos» y en el que lo primero es introducir a los más pequeños en el patinaje. Pudieron hacerlo en una mañana con diversos juegos y una gymkana a lo largo del casco histórico.  Todo ello al objeto de seguir creciendo y mirando a la puesta en marcha de un equipo sénior. «Ahora se interrumpe a los 18 años» señalan en un objetivo que, viendo la cantera, podría ser posible a no mucho tardar.