El pasado romano de San Pedro del Arroyo está escrito en cada piedra de su yacimiento, un espacio donde aún queda mucho por descubrir y que es seña de identidad de la localidad.

Aunque ese lugar sea una parte del pasado, las raíces romanas son aún parte del orgullo del pueblo, de ahí que por tercer año se haya puesto en marcha un mercado romano que durante unos días ayuda a acercarse a esos orígenes, aunque sea desde un punto de vista más actual e incluyendo nuevas actividades.

 Lo cierto es que los vecinos han podido disfrutar durante este fin de semana de un mercado romano formado por doce puestos y que, bajo techo ofreció variedad de productos. Entre los puestos se podía ver quien se había animado a cambiar la ropa por aquella que recordaba a los romanos mientras ofrecía a sus visitantes algunos de sus enseres. Paseando por el lugar donde se instaló este mercado se podían ver variados accesorios como bisutería con pulseras o pendientes, relojes, llamadores de ángeles, especies, embutidos, quesos, aceites, cremas o incluso algunos elementos de decoración o relacionados con el arte. La artesanía también tuvo su propio espacio con productos de manera y algunas creaciones en forma de mimbre que llamaron mucho la atención.

Durante la jornada del domingo, se pudo ver cómo el público seguía visitando este mercado donde también, gracias al Ayuntamiento, se organizó una degustación de paella popular que ya desde la mañana se estaba preparando. Junto a ella, los cocineros se afanaban en tenerlo todo listo para unas 350 personas.

A pesar de que el fin de semana estaba destinado específicamente al mercado romano, también se pudieron organizar otras actividades, entre las que destacó este domingo una exposición de coches clásicos.

La actividad, aunque en menor medida, se retomará este lunes con juegos infantiles (18,30 horas), seguidos de una chocolatada popular (19,30 horas) y el fin de fiesta que llegará a las 21,00 horas.