A principios de abril del pasado año el Ayuntamiento de Ávila daba luz verde a las normas reguladoras de la concesión de ayudas para el pago del impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana-conocido como plusvalía-, en los casos de ejecuciones hipotecarias de la vivienda habitual y la dación en pago al acreedor hipotecario.
Un año después de aprobarse estas ayudas, que tenían carácter retroactivo para las transmisiones producidas con posterioridad al 31 de diciembre de 2008, el Ayuntamiento de Ávila ha recibido una treintena de solicitudes, de las que finalmente se han concedido un total de 19 ayudas por un importe total de 22.181,63 euros, si bien, explica Patricia Rodríguez, teniente de alcalde de Servicios Sociales, sólo en uno de los casos (en el que la transmisión estaba liquidada y abonada) el Ayuntamiento devolverá el importe del impuesto de plusvalía, en total 1.078,85 euros, ya que en las 18 solicitudes restantes aprobadas los beneficiarios no habían satisfecho aún este impuesto. Así las cosas, explica Rodríguez, la Concejalía de Servicios Sociales asumirá el pago de los 21.110,88 euros (cuantía en la que se incluye no sólo el impuesto sino también los intereses generados por la demora en el pago) correspondientes a las 18 concesiones que no habían satisfecho este tributo. Además, al abonar el Ayuntamiento la deuda contraída por estos beneficiarios, señala Rodríguez, los mismos «desaparecerán del listado de morosos» municipal.
Esta línea de ayudas, que «no se ha vuelto a convocar porque no ha habido más demanda, si bien si la hubiera se estudiaría una nueva convocatoria», estaba condicionada al cumplimiento de una serie de requisitos, entre los mismos «que se tratara de la vivienda habitual o que el precio de la adquisición de la misma no hubiera excedido la cantidad de 180.000 euros». El incumplimiento de estos y otros requisitos contemplados en la convocatoria, «cuya normativa se ha ido adaptando a través de acuerdos de Junta de Gobierno a las situaciones planteadas por las distintas solicitudes», ha dado lugar a la denegación de 11 solicitudes del pago del impuesto de plusvalía. En tres casos, explica la responsable municipal de Servicios Sociales, estas ayudas se denegaron por superar el límite de ingresos, otros tres por no tener la consideración de vivienda habitual y el mismo número por superar el precio de compra de la vivienda los 180.000 euros. Además, otra solicitud se resolvió de forma negativa por tener el solicitante otro inmueble en propiedad, y otra más por no tratarse de un caso de dación en pago ni similar a la dación.
El objeto de esta convocatoria de ayudas era, como recuerda Rodríguez, «devolver a aquellas familias desahuciadas de su vivienda habitual por no poder hacer frente al pago de la hipoteca el importe del impuesto de plusvalía porque entendíamos que había familias en esa situación a la que ese dinero les vendría muy bien».