Las carreteras N-110 y N-502 se cortan al tráfico por inundaciones

diariodeavila.es
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La sufrida en Muñogalindo este sábado ha sido la peor inundación en 50 años tal y como relataban los vecinos

Las carreras nacionales N-110 y N-502 tuvieron que cortarse al tráfico durante la jornada de este sábado debido a inundaciones muy importantes sufridas en el Valle Amblés. Una de las localidades más afectadas fue Muñogalindo donde una fortísima tormenta descargó agua y granizo durante unas dos horas ocasionando una verdadera riada en un tercio del pueblo, la parte baja. El hecho se produjo en torno a las 14,30 horas cuando comenzó la lluvia, que fue creciendo en virulencia y que se acompañó después de granizo lo que ocasionó que las agua del monte bajaran hasta el núcleo urbano, desbordando el arroyo Garoza, que, incluso hizo  que el puente situado en la localidad corriera el riesgo de desplomarse. Se trata de un regato normalmente «seco», afirmaban los vecinos que, con caras de verdadero susto, afirmaban no recordar que hubiera pasado nada similar en 50 años. Calles como verdaderos ríos, contenedores de obra florando y a la deriva, turismos, arrastrados por el agua y empotrados contra muros, viviendas con un metro de agua, garajes completamente sumergidos... este era el panorama que se contemplaba en esta localidad del Amblés atravesada por la N-110 que estuvo cortada al tráfico por espacio de casi 50 minutos, desde las 16,15 hasta las 17 horas aproximadamente. Así lo relataba a esta redacción uno de los número de las Guardia Civil de Tráfico que se encontraba llevando a cabo el corte. «Había peligro de hundimiento del puente» y en un momento dado, el agua colonizó también la carretera. Una vez que se aseguraron de que el puente no corría peligro, se abrió la circulación, aunque con precaución, por lo que la Guardia Civil se mantuvo en la zona durante un tiempo más, observando el caudal del arroyo, que poco a poco fue bajando. El fango y el lodo se hicieron visibles entonces, junto a numerosas pertenencias personales dispersadas por las calles y llenas de barro.

 

Corte en la N-502. Todo ese agua fue a desembocar poco después a la carretera N-502, en el kilómetro 17, justo en una vaguada por lo que se formó una inmensa balsa de agua ante la imposibilidad de que el puente construido en la carretera pudiera sujetar la gran masa de agua. Bomberos de Ávila, operarios del Ministerio de Fomento, Protección Civil, con dos vehículos quitanieves se encargaba de achicar el agua mientras que efectivos de la Guardia Civil facilitaban a los conductores rutas alternativas. El tráfico quedó restablecido restablecido en torno a las 19,45 horas.