El alcalde de El Burgo de Osma, Jesús Alonso, explicó a Europa Press que el fuego declaro ayer en el barrio de Barcebalejo sobre las 14.00 horas quedó controlado y había calcinado entre 800 y 1.000 hectáreas de monte, si bien ofreció estas cifras «con todas las cautelas», a la espera de que los técnicos realicen la perimetración oficial.
Alonso aseguró que se trata del «incendio más grande de la historia» de la comarca de El Burgo de Osma y lamentó la pérdida de un monte de «gran valor económico y ecológico», tanto por los aprovechamientos forestales (enebro y carrasca, fundamentalmente) como por los cinegéticos.
También serefirió a los momentos de tensión que se vivieron a lo largo de la tarde, cuando se preparó todo el operativo ante la posible evacuación, que no se llegó a producir, de las poblaciones de Valdenarros, Santiuste y Torralba de El Burgo, con unos 100 habitantes en total. «En estos barrios de El Burgo de Osma residen alrededor de un centenar de personas, para las que se dispuso el polideportivo burgense y «todos los servicios» en caso de que hubiera sido necesaria la evacuación», aseveró el regidor burgense.
Según detalló, hubo un momento en el que las llamas se dirigían hacia Valdenarros, por lo que se estableció «todo el operativo para una posible evacuación» de estos pueblos, que visitó el alcalde para «trasladar tranquilidad».
Alonso señaló que las llamas comenzaron en la dehesa de Barcebalejo, «parece ser que por las chispas de una cosechadora, pero con todas las reservas», y siguieron por la ladera hacia el monte de Barcebal. «El viento ha cambiado en torno a las 15.00 horas y todo se ha complicado y el fuego ha subido por la cuesta de Los Traviesos y hacia la N-122. Ha sido muy enrevesado y difícil de controlar», concluyó.
En el operativo trabajaron unas cien personas, con apoyo de la Unidad Militar de Emergencias y mantuvo durante más de cinco horas la N-122 cortada entre los puntos kilométricos 185 (estación de servicio Venta Nueva) y 213 (El Burgo de Osma).
Los medios movilizados son nueve agentes medioambientales, tres técnicos, cinco cuadrillas terrestres y una Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF), tres cuadrillas helitransportadas, diez autobombas, cinco bulldozer, tres helicópteros, otro de coordinación (hotel) de Valladolid, dos aviones de carga en tierra (Agoncillo, La Rioja) y cuatro anfibios -dos de Torrejón de Ardoz, uno de Matacán (Salamanca) y otro de Zaragoza-.