Convocados por Marea Ciudadana más de medio millar de personas secundaron una manifestación que partió del Mercado Chico con el claro lema de «No más abusos, no más recortes», aunque no fue la única proclama que se escuchó en el transcurso de esta concentración. Haciendo paradas en la sede del PP, como la sede del partido político que ha estado gobernando con mayorías durante más años desde la democracia; también en la biblioteca pública, símbolo de los servicios públicos necesarios para los que piden el mantenimiento; y en el mercado Grande donde se dio voz a todo aquel que quiso tomar la palabra y es que la manifestación daba cabida a los múltiples movimientos ciudadanos que han ido surgiendo con el transcurso de los últimos meses: los afectados por las preferentes, los afectados por los desahucios, los miembros del 15-M, la plataforma por la educación de Ávila aportaban cada uno a sus propios seguidores y sus propios lemas.
Al son de la percusión y en un transcurrir tranquilo aunque «indignado» se iban escuchando por las céntricas calles de Ávila voces como las que decían «Tú que estás mirando, a tí te están robando»; «Congreso de los Diputados ha tomado los mercados»; otras pancartas reclamaban la «dación en pago y el alquiler social» y otras más como la de los vecinos de Pradosegar demandaban el mantenimiento de los servicios públicos.
Tomaron la palabra la portavoz de los afectados por las preferentes y de Marea Ciudadana, Pilar Baeza defendiendo la convocatoria de varias plataformas en pro de los derechos y contra «la injusticia social: no más recortes no más abusos».
Gabriel de La Mora, por parte del Movimiento 15-M reivindicaba una democracia real y arremetía especialmente contra la corrupción política que está generando, dijo, «una descomposición total del estado social democrático de derecho» y asegurando que «el otro día los jueces entraron en huelga porque el Gobierno quiere controlar el poder judicial en pleno». Por supuesto que en este punto salieron críticas con nombres y apellidos en relación con posibles casos de corrupción como el de Bárcenas o Mato y Sepúlveda.
«Queremos unas auténticas leyes de transparencia y no lo que nos quieren vender», decía De La Mora.Todos los partidos, dijo, en su día votaron a favor de la ley del blanqueo de capitales pero «todos se excluyeron a sí mismos en el año 2010». «No nos creemos nada y la situación debe cambiar inmediatamente», sentenció.