Doscientos cuatro nuevos subinspectores del Cuerpo Nacional de Policía, 185 y 19 mujeres, pertenecientes a la XXIII promoción de esta escala, juraron este viernes sus nuevos cargos en la Escuela de Policía de Ávila –que por primera vez llevan aparejado el título de Grado universitario–, en un acto solemne que estuvo presidido por el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y en el que también estuvieron presentes, entre otras autoridades, el director general de la Policía, Ignacio Cosidó; el delegado del Gobierno en Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones; el alcalde de Ávila, José Luis Rivas, y la subdelegada del Gobierno en Ávila, María Ángeles Ortega.
El acto, que se celebró en el polideportivo de la Escuela de Policía, se abrió con la entrega del bastón de mando del Cuerpo Nacional de Policía al ministro del Interior, quien inmediatamente pasó revista a los nuevos subinspectores.
Tomó a continuación la palabra el jefe de estudios y director en funciones de la Escuela, Ángel Díaz, para dar la «última lección del curso», un discurso breve y emotivo en el que, tras agradecer a las familias de los nuevos subinspectores el apoyo ofrecido a éstos, dio la enhorabuena a quienes «habéis superado una dura etapa de formación», unos policías de quienes «nos sentimos orgullosos». A todos ellos pidió que no pierdan nunca de vista «los valores de comportamiento que dan identidad propia a este cuerpo, como son el sacrificio, la generosidad, la lealtad, la empatía, la entrega, la solidaridad, la integridad y el compromiso».
Aprendizaje constante. El discurso lo cerró Díaz asegurando que «la última lección no es otra que en la Policía no hay última lección, porque siempre hay que estar aprendiendo algo nuevo, y vuestra actualización permanente será la clave de vuestro éxito».
Tras la jura-promesa de acatamiento a la Constitución tomó la palabra el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, el cual dio un baño de satisfacción a los nuevos cargos asegurando que «la labor de todos los policías es esencial para el éxito conjunto del CNP, porque cada escala es fundamental, pero la de subinspector, como mando intermedio, es la piedra angular de todo nuestro esfuerzo».
Cosidó hizo referencia a la próxima aprobación en el Congreso del proyecto de Ley Orgánica de Régimen de Personal de la Policía Nacional, que supone que los subinspectores «accederán a puestos de mayor responsabilidad hasta ahora reservados sólo a la escala ejecutiva», y no olvidó destacar que el título de Grado universitario que lleva aparejado por primera vez el cargo de subinspector «es un cambio que no sólo reconoce vuestro nivel de formación sino que también es garantía de calidad en el servicio que prestamos a los ciudadanos», para cerrar su discurso asegurando que «no os pido nada porque tengo la seguridad de que lo vais a dar todo».
Tomó finalmente la palabra el ministro de Interior, Jorge Fernández, quien tras recordar que estamos «en el año del V Centenario del nacimiento de Santa Teresa, patrona de esta Escuela», ponderó también «la importancia de la escala de subinspección como eslabón entre la superioridad y los compañeros que están más cerca de la calle», y asimismo porque «dais cohesión interna y la necesaria disciplina y sois indispensables para la vertebración y el adecuado funcionamiento del Cuerpo Nacional de Policía».
Tras haber superado un tiempo de formación en el que «habéis demostrado conocimientos, actitudes y habilidades», añadió el ministro, «afrontáis ahora nuevos desafíos para los que estoy seguro de que estáis preparados».
También destacó Fernández Díaz en su intervención que en la actual legislatura el Gobierno ha aprobado «importantes leyes» que suponen «la modernización de la arquitectura normativa de todos los ámbitos de la seguridad», citando la reforma del Código Penal y la Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana, que implican que España cuenta con «mejores leyes y más actualizadas», así como la ley que crea el Sistema Nacional de Protección Civil.