El nuevo equipo de gobierno del Ayuntamiento de Ávila presentó este miércoles sus primeros presupuestos, que apuntan a la baja arrastrados por la rebaja en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), pero se anuncian desde el Partido Popular que son los «que se ajustan a las necesidades de la ciudad» y a expensas de los que puedan aportar el resto de grupos políticos municipales, ya avisan que «no se les puede pedir más».
La teniente de alcalde de Hacienda, Belén Carrasco, junto con el concejal delegado Felipe Gutiérrez, fueron los encargados de hacer pública la propuesta económica del equipo de gobierno para el año que viene, que asciende hasta los 53.524.505,45 euros, lo que supone un 2 por ciento menos (1.093.455,55 euros), que los presupuestado para este año 2015, que se elevaba hasta los 54.617.961,87 euros.
Carrasco explicó que esta caída, que rompe dos años consecutivos de subida, se debe en primer lugar «a la bajada del IBI adaptada en nuestras ordenanzas fiscales» y que se traducirá en «una recaudación de 825.185 euros menos para este año 2016» por este concepto.
Además, «también habrá una bajada en los ingresos por tasas y precios públicos» y también se achaca la caída a la desaparición de «anticipos de la paga extraordinaria, que se pagarán con los ingresos corrientes municipales, sin necesidad de que se solicite ningún anticipo».
objetivos. No obstante, Carrasco subrayó que estas bajadas «se absorben con el resto de conceptos que componen el presupuesto, al realizarse la gestión de impuestos de forma más eficaz, reforzando la gestión tributaria de forma que se pueda liquidar más adecuadamente».
Desgranadas las cuentas para el año que viene, destaca el hecho que tres de cada cuatro euros que se gasten en el Ayuntamiento de Ávila irán destinados a pagar las nóminas del personal y el gasto corriente, partidas ambas que suman el 74% del total, con 39 millones de euros. Eso deja unos 14 millones para inversiones (5,2), rebajar deuda (4,1) y transferencias corrientes (3,9), cantidades con las que se pretende desde el Partido Popular cubrir diferentes objetivos, comenzando, comentó Carrasco, por «crear las condiciones favorables para la creación de actividad económica y por extensión de empleo», con «un impulso decidido a los polígonos industriales de la ciudad con la creación de un centro de innovación y negocios (para lo que hay 25.000 euros presupuestados) y un plan de desarrollo económico como apoyo a las empresas y emprendedores (con una dotación total de 140.000 euros)».
Además, «se blindan los servicios sociales básicos» y «se invierte en ciudad manteniendo y mejorando las infraestructuras con las que cuenta la ciudad», intentando también «mantener los apoyos a través de subvenciones al tejido asociativo de la ciudad» y «la prioridad del pago a proveedores en el plazo de 30 días que nos marca la ley», sin perder de vista el «dejar la deuda por debajo del 75 por ciento de los recursos liquidados».
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