«La comunicación es para nosotros una intervención directa»

Ana Agustín
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Es uno de los tres participantes en la conferencia coloquio que dentro de la iniciativa CREA de Cruz Roja, acudirá este jueves 28 de abril al Casino Abulense para  compartir su experiencia como periodista responsable de Comunicación Externa del Departamento de Comunicación e Imagen de Cruz Roja Española y, sobre todo, de la Unidad de Comunicación de Emergencias (UCE) de Cruz Roja. Como delegado de Información ha trabajado sobre el terreno en Irak, Marruecos, Darfur, Indonesia, Pakistán, Java, Guinea Bissau, Burundi, Nepal y Grecia. Le acompañarán Ángel García, director de cooperación Internacional y Sara Escudero, miembro de las unidades ERU para hablar del trabajo de Cruz Roja en situaciones de emergencia.

¿Cual será el contenido de su intervención en la charla?

Me centraré sobre todo en  el ámbito de comunicación de emergencias, que es mi campo de trabajo, y también contaremos muchas anécdotas durante las operaciones. Soy responsable de comunicación externa y de la UCE, la Unidad de Comunicación de Emergencias.

¿En qué consiste su trabajo?

Soy coordinador de los equipos que desplegamos en el lugar de una emergencia, comunicadores e informadores que se desplazan a las emergencias mediáticas y no mediáticas. Voy yo mismo o alguien de mi equipo. Para Cruz Roja Española, la información se concibe como una forma de intervención directa en emergencias porque una persona afectada por un desastre ya sea natural o por un conflicto armado necesita información tanto como  comer o beber. La UCE está integrada por cerca de 100 miembros, casi todos periodistas y son quienes se desplazan dentro y fuera de España. Los últimos delegados tienen como destino Grecia para informar sobre la crisis de refugiados. También Croacia y el terremoto de Ecuador.

Y estan en el terreno, junto a las víctimas, a las emociones, el peligro, a veces... y cumpliendo un trabajo impecable de información

Nuestra misión es esa, gestionar toda la información que está sucediendo sobre el terreno. La última hora, las historias de vida, la difusión de toda esa información y... luego, en una emergencia, te toca hacer de todo, aunque vayas con un rol  específico.

¿Cuánto les han ayudado las nuevas tecnologías?

Mucho, y hay que aprovecharlas al máximo, aunque no basta sólo con ellas. Estamos viendo avances muy importantes para la cobertura de una emergencia no solo por la posibilidad de emitir en directo sobre el terreno, sino, incluso, en el acceso. En el caso de la crisis de los refugiados, podemos acceder a las grabaciones de los propios damnificados, de los afectados. Eso te da una visión mucho más real. Toda la comunicación de emergencias pivota sobre una máxima, que tiene que contribuir a mejorar la situación de la persona afectada por esa emergencia. En el centro de la comunicación siempre ha de estar la víctima.

¿Cuántas emergencias olvidadas hay y cual es su papel en ellas?

Está claro que cuanta mayor cobertura hay de una emergencia, mayores son los recursos destinados. Uno de los problemas con los que nos enfrentamos son los de las emergencias olvidadas, ingnoradas o ninguneadas. Como ejemplos, una grave crisis en Etiopía, el conflicto sirio, que sigue en Guerra, Sudán del Sur. En todas ellas hacemos un gran esfuerzo para visibilizarlas porque están fuera de las agendas de los medios de comunicación.

¿Cual ha sido su misión más impactante?

Me impactan mucho más las emergencias generadas por la mano del hombre, los conflictos armados, que las generadas por desastres naturales. Mi primera misión, la guerra de Irak, por ejemplo.