"La música clásica tiene poco público"

M.M.G.
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Antonio Bernaldo de Quirós lleva la música clásica en las venas. Desde muy pequeño vivió en casa el amor por el piano y hoy, a punto de cumplir 21 años, estudia hacia donde encaminar sus pasos aunque, eso sí, siempre con su pasión en mente

ANTONIO Bernaldo de Quirós (Ávila, 1997) sueña, como todo pianista, con tocar en el Carnegie Hall, en Nueva York. O en Royal Albert Hall, de Londres. O en la Sala Grande del Conservatorio de Moscú. Y lo sueña desde muy pequeñito. Porque la vida de Antonio ha pivotado desde siempre sobre el piano. Desde que con dos añitos su madre le sentó en sus piernas delante del instrumento y comenzó a jugar con él a repetir las notas que ella le arrancaba al instrumento.

¿Qué es lo primero que le viene a la cabeza sobre Ávila?

Diría que el frío, pero es el tópico. Ávila son mis orígenes. Aunque mi madre es de Japón yo me considero de aquí: aquí he nacido y aquí he vivido toda la vida.

¿Qué es lo que más le gusta de Ávila?

Quizá suena paradójico, pero lo que más me gusta es que es una ciudad pequeña. A mí me gusta bastante la tranquilidad. Sobre todo en estos dos últimos años que he estado en Madrid, volver a Ávila, que es la antítesis, es como volver a un remanso de paz.

¿Y lo que menos?

Pues que como es una ciudad pequeña, a veces no encuentras todo lo que necesitas. A veces tienes la sensación de que está un poco aislada.

Un lugar en el que se perdería

Diría mi casa, ja,ja. Pero me encanta El Soto, a veces voy a correr allí, a hacer ejercicio, porque para los músicos también es muy importante estar en forma.

Un recuerdo de su infancia

A mí me gustaba mucho la lluvia de pequeño, y recuerdo que cuando  se ponía a llover y yo estaba tocando mis padres me decían que llovía porque estaba tocando. Y yo quería tocar más para que lloviera más. 

Un personaje abulense que le haya marcado.

Mi padre. 

¿Cuál es el mayor cambio que necesita Ávila?

Necesita modernizarse, entre otras cosas. 

¿Qué tiene que mantener?

Evidentemente todo el patrimonio cultural que tiene, que es enorme. Y en relación a lo que hablábamos antes, a mí no me gustaría que se convirtiera en una gran ciudad. Es una ciudad que está muy en contacto con la naturaleza, y eso es algo que me gusta mucho.

¿Qué le parece la ciudad hoy en día?

La veo un poco envejecida. Aunque poco a poco ves que se va modernizando. Yo noto que está aislada, como ocurre en general enCastilla y León. Me parece que como la conexión entre Ávila y Madrid no es buena ni por tren ni por carretera la ciudad está un poco estancada. 

¿Cómo ve la ciudad en el futuro?

Todo depende de lo que pase, pero si sigue así seguirá estancada. Yo no creo que vaya a cambiar mucho. 

¿Qué puede aportar a la ciudad?

Ahora mismo lo que puedo aportar sin duda son conciertos y aportar la música a la gente. También llevo el nombre de Ávila fuera, cuando voy a actuar. La gente sí que me reconoce como pianista abulense, me identifican con el nombre de Ávila.