Los ataques de lobos que sufren con más frecuencia de la que quisieran los ganaderos fue otro de los temas que se pusieron sobre la mesa durante la visita que el consejero de Fomento realizó a la capital abulense. Así las cosas, y tras reconocer que las indemnizaciones tras los ataques se abonan «tarde», Suárez-Quiñones anunció que desde la Administración regional se va a poner en marcha «un seguro que permita que el pago de la indemnización sea justo y lo más rápido posible». Esto, aseguró el consejero, va a suponer «un cambio sustancial», ya que permitirá que los trámites para el abono de las indemnizaciones se agilicen y sean «infinitamente menores», fundamentalmente porque ya no será necesario iniciar un expediente de responsabilidad patrimonial y bastará con uno de pago de una cobertura de seguro.

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