El presidente de la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Servicios de Ávila, David Sahagún, ha mostrado su confianza en que una vez que se ha aprobado en las Cortes regionales la nueva Ley de Cámaras de Comercio de Castilla y León, que va a permitir que «empiecen a tener financiación estable y pública», la institución cameral abulense consiga salir de la «complicada» situación en la que se encuentra, y que ha llevado a que la mayor parte de su personal haya rescindido su contrato de trabajo después de permanecer varios meses de cobrar. A pesar de ello, David Sahagún asegura que la Cámara de Comercio de Ávila no se va a cerrar, y espera que a partir de «enero o febrero» comience a llegar financiación estable, y con ello que se empiece a retomar la actividad en la institución. A su vez, precisó que «aquí todavía hay gente que está trabajando y el Comité sigue desempeñando su función, y yo como presidente».

David Sahagún destacó el importante paso que se dio el pasado 28 de noviembre en las Cortes, con la aprobación de una ley «que es por lo que las Cámaras de Comercio de Castilla y León, no sólo la de Ávila, han luchado». En este sentido, precisa todas las instituciones camerales «están teniendo una situación incómoda, y con la ley aprobada las Cámaras vuelven a tener financiación para seguir realizando la función pública y administrativa que tenían encomendada».

Sahagún reconoce que la situación es «complicada, pero como la que surgió hace cuatro meses, hace ocho o hace un año». Y es que, según recuerda, «desde 2010, la Cámara no tiene financiación, y cada vez ha ido a peor porque no ha habido dinero. Y si no hay dinero, no hay actividad, como ocurre en cualquier empresa o negocio». Pero insiste en que ahora, una vez que «nos van a dar financiación estable, cómo vamos a cerrar». 

David Sahagún destacó la labor que ha desarrollado el Comisionado para la Ley de Cámaras de Comercio, Antonio Méndez Pozo, presidente de la Cámara de Comercio de Burgos, y «lo que ha luchado» para que las entidades camerales tengan «financiación estable», por lo que Sahagún no ve lógico que «cuando lo conseguimos y se da una solución, cerremos».

Sahagún también se mostró comprensivo con la decisión que han tomado los trabajadores de la Cámara que han decidido rescindir su contrato después de estar al menos tres meses sin cobrar. «Están en su derecho, y es lógico y normal que después de tiempo sin cobrar hayan decidido rescindir su contrato». En estos momentos, la Cámara de Comercio de Ávila cuenta con un empleado y tres en excedencia.